La producción de aceite de oliva caerá en muchos países productores y no solo en España en 2022/23
La Comisión Europea prevé que la producción mundial de aceite de oliva se contraerá en la actual campaña 2022/23 un 22,75% y en unas 773.000 toneladas, hasta quedar en 2,625 Mt, de los cuales algo más de 1,5 millones serían aportados por los países productores de la Unión europea, con un descenso del 34% respecto a los 2,272 Mt de 2021/22, y 1,12 Mt por países terceros.
En la UE, España obtendría algo más de la mitad de la producción oleícola total, un 51,8% y 780.000 t (datos avanzados por el MAPA en octubre); Italia bajaría hasta las 235.000 t (-29%), y volvería a ser superada por Grecia, donde se prevén 350.000 t (+51%) y que se recuperaría de la baja producción de la campaña anterior. Además, Portugal aportaría mucho menos, con 125.000 t (-39%) y el resto de países productores (Francia, Croacia, Eslovenia, Chipre, Malta…) obtendría en conjunto unas 15.000 t (+14%).
Fuera de la UE, las previsiones de Bruselas, a partir de los datos aportados por el Consejo Oleícola Internacional (COI), son de 1,12 Mt, con una leve caída del 1% y de apenas 17.000 t en relación a la campaña anterior 2021/22.
Aquí la sorpresa la daría Turquía, que se erigiría como primer país productor extra-comunitario, con una previsión de 275.000 t (+17%), superando a Túnez, el proveedor principal de la UE, que se quedaría por debajo en segundo lugar, con 180.000 t, un 25% y 60.000 t menos que en el periodo anterior.
En tercer lugar se situaría Marruecos, con 156.000 t previstas y un descenso también del 22%, debido a la sequía y la vecería, mientras que, por el contrario, Siria se recuperaría hasta lograr 134.500 t, un 27% y 29.000 t más que en 2021/22.
El resto de países productores extra-comunitarios (Estados Unidos, Argentina, Chile, Jordania, Israel, Palestina, Australia…) obtendría en conjunto otras 375.000 t, con un incremento del 8% y también de unas 29.000 t más que en el periodo anterior.
Previsión de recorte drástico de los stocks de aceite de oliva en la UE pero sin llegar a mínimos
Por otro lado, según la Comisión Europea, las existencias finales a 30 de septiembre de 2022 se prevé que desciendan drásticamente, aunque sin llegar a los mínimos de la campaña 2015/15, que se quedaron en apenas 177.000 toneladas, ni tampoco de las dos siguientes, con 359.000 t y 322.000 t, respectivamente en 2015/16 y 2016/17.
Bruselas prevé, por el momento, unas 375.000 t de stock de final de campaña 2022/23 que, de confirmarse (aunque aún es bastante pronto) supondría una reducción del 45% y de 295.000 t de aceite de oliva respecto al stock de final de campaña anterior (670.000 t) en la UE.
La menor oferta disponible de oliva afectará también, vía reducción de volúmenes y vía subida de precios, al consumo mundial de aceite de oliva, que la CE (con datos de COI) prevé que se mantenga por encima de los 3 millones de toneladas, una cifra similar a la de la campaña 2018/19 (3,042 Mt). De este volumen, 1,64 Mt de aceite de oliva se consumiría en países terceros, la misma cifra que la estimada en 2021/22, mientras que 1,412 millones (cifra muy preliminar todavía) se haría dentro de la propia UE, con un descenso de casi un 9% y de 139.000 t respecto a la campaña anterior.