La UE cambia la normativa de etiquetado de los huevos
La Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos (INPROVO) informa de que la Unión Europea (UE) ha cambiado la normativa de etiquetado de los huevos para ofrecer mayor transparencia y mejorar la información ofrecida a los consumidores europeos en el envase.
La UE publicó en noviembre del pasado año la actualización del reglamento de comercialización de huevos, que en España se aplicará mediante el Real Decreto 1027/2024, publicado el 9 de octubre, que desarrolla la regulación europea en España y cambio los nombres de algunos sistemas de producción.
Los huevos según su modo de producción se clasifican en: “huevos de gallinas criadas en jaulas acondicionadas” (antes “huevos de gallinas en jaula”), «huevos de gallinas sueltas en el gallinero” (antes “huevos de gallinas en suelo”), “huevos de gallinas camperas” y “huevos de producción ecológica”.
Además, los huevos aromatizados, presentes desde hace años en el mercado español, llevarán en el envase la frase “huevos aromatizados con”, seguida del alimento o aroma utilizado en su elaboración. También llevarán las demás indicaciones obligatorias en los envases de huevos frescos.
La norma mejora la información del etiquetado para que el consumidor elija fácilmente los huevos que compra según sus características y sistema de producción. Entre los nuevos requisitos está también que los huevos se marquen, salvo excepciones, en la granja de producción, para garantizar la trazabilidad.
Además de los huevos frescos de gallina, hoy en día podemos encontrar en el mercado huevos de otras aves y también ovoproductos. Estos tienen regulaciones específicas.
Los huevos de otras aves cumplen los requisitos del Reglamento 853/2004, que indica que deben suministrarse al consumidor en un plazo máximo de 28 días desde la puesta, pero la fecha de consumo preferente la determina el operador que los comercializa. A diferencia de los de gallina, los otros huevos no requieren llevar marcado el código identificativo de la granja en la cáscara, ni se clasifican por peso o calidad.
En cuanto a los ovoproductos, como los huevos cocidos y las claras pasteurizadas, se etiquetan según lo establecido en el Reglamento 1169/2011, que incluye la información alimentaria obligatoria.