Tras el fiasco del pasado 20 de mayo, cuando el Comité Permanente Fitosanitario sobre Animales y Plantas (SCOPAFF) de la UE retiró sorprendentemente, sin ni siquiera someter a votación, la propuesta de la propia Comisión Europea para reglamentar la aplicación del tratamiento en frío (“cold traetment”) a las naranjas exportadas al mercado comunitario desde Sudáfrica y Zimbawe, el ministro de Agricultura, Luis Planas, se reunió este lunes 22 de urgencia con la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, para abordar esta problemática.
Planas trasladó a la comisaria el malestar del sector citrícola de nuestro país y de la Administración española por que la propuesta que la Comisión Europea para aplicar el tratamiento en frío a los cítricos que se importan desde terceros países, para evitar la entrada de plagas, como la falsa polilla, a territorio comunitario, no haya sido debatida y aprobada, como estaba previsto y exigió a la CE que “de forma inmediata” se adopte dicha decisión.
Las organizaciones representativas del sector citrícola español sospechan que ha sido la fuerte presión ejercida ante las instancias comunitarias por los “lobbies” de las empresas exportadoras sudafricanas y de los Países Bajos, por cuyos puertos (Rotterdam, La Haya) entran la mayor parte de los cítricos de esos orígenes al mercado UE, la que ha paralizado por el momento la aprobación de la citada propuesta, con el riesgo de que aún no haya entrado en vigor cuando en el mes de septiembre empiecen a importarse las naranjas procedentes de África del Sur.
El ministro español trasladó a la comisaria Stella Kyriakides el fuerte malestar de España porque esta cuestión no se haya presentado todavía para su aprobación en el SCOPAFF. “No es bueno este retraso”, señaló, ante un problema que explicará a sus homólogos del Consejo de Ministros de Agricultura por su importancia para la protección de la sanidad vegetal de la Unión Europea.
No obstante, Planas informó que los equipos técnicos de la Comisión Europea y del Ministerio de Agricultura trabajan ya en la redacción de un documento de acuerdo para que se apruebe lo antes posible y explicó que los dos objetivos de España en este asunto son que se tome la decisión de manera inmediata y que ésta sea efectiva.
Riesgo real
“No se trata simplemente de aplicar las recomendaciones, que publicó el año pasado Agencia de Seguridad Alimentaria (EFSA), sino de que, efectivamente, las condiciones de temperatura y transporte de los productos que se importen permitan que, en ningún caso, exista riesgo de que la falsa polilla sea una amenaza para nuestros cultivos”, señaló el ministro.
Planas recordó también los daños ocasionados por plagas importadas en el sector de los cítricos, por lo que volvió a insistir a la Comisión sobre la obligación que tiene de proteger a los agricultores europeos frente a estas amenazas.
El pasado mes de enero, la Comisión presentó a los Estados miembros la propuesta de modificación de la normativa de protección sanitaria frente a la polilla del naranjo (Thaumatotibia leucotreta Merryck), que introduce la obligatoriedad del tratamiento en frío para las importaciones de terceros países de zonas en las que esté presente la plaga. Esta es propuesta que tiene que presentarse ante el SCOPAFF para su aprobación, señaló el MAPA.
Este departamento indicó que, desde la inclusión de la polilla del naranjo en la lista de plagas cuarentenarias para la UE en 2017, el Gobierno de España viene trabajando ante las instituciones europeas para garantizar que la normativa comunitaria en materia de importación asegure el estatus fitosanitario de los cítricos procedentes de países no comunitarios, con el fin de evitar su entrada, mediante el establecimiento de requisitos específicos para la importación de productos potencialmente afectados.
Además, esta medida de tratamiento en frío para los cítricos comercializados es demandada por otros países terceros, como Estados Unidos, Japón o China, a los productos procedentes de la Unión Europea, precisamente para evitar la entrada de posibles plagas en sus territorios.
El MAPA informó también que, en la reunión del ministro Planas con la comisaria Kyriakides se abordó también el calendario de propuestas legislativas que, previsiblemente, serán tratados durante la presidencia española de turno de la UE, en el segundo semestre de 2023.
Entre ellos se incluye la propuesta sobre etiquetado frontal de productos alimentarios, en la que España tratará de que quede reflejada la Dieta Mediterránea, la edición genética, o la propuesta de una directiva comunitaria para combatir el desperdicio alimentario.
Asimismo en la agenda de la presidencia española habrá también asuntos relacionados con la utilización de productos fitosanitarios y la producción sostenible de alimentos.