El ministro de Agricultura, Luis Planas, abogó ante la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Stella Kyriakides, por mejorar el análisis de impacto, con el fin de compatibilizar la sostenibilidad y el uso sostenible de productos fitosanitarios con la necesaria rentabilidad de las explotaciones agrarias.
Planas pide a la CE mejorar el análisis de impacto de la propuesta reglamentaria sobre uso sostenible de fitosanitarios
Planas transmitió también a Kyriakides que en materia de etiquetado se apueste por un sistema armonizado para toda la Unión Europea, que prestigie la producción alimentaria comunitaria, a través de un sistema de información completo y veraz.
Según el ministro, el etiquetado es una herramienta fundamental para que los ciudadanos puedan realizar una elección de compra con criterio entre distintos productos, pero debe ser un sistema claramente comprensible y basado en el consenso científico.
Planas añadió que los alimentos no deben considerarse de manera individual, sino como parte de una dieta saludable más amplia. Al respecto, afirmó que “no debe demonizarse ningún alimento”, por lo que cualquier sistema que se adopte finalmente, “debe tener en cuenta la Dieta Mediterránea, en la que el aceite de oliva juega un papel muy importante.”
En relación al etiquetado de origen, el ministro consideró “prioritario para España”, una armonización en el ámbito comunitario, con el fin de que no se produzcan distorsiones comerciales en el mercado interior ante diferentes niveles de exigencia.
De esta forma, añadió Planas, “la indicación de origen debe poner en valor el modelo de producción comunitario, que es todo un ejemplo a nivel mundial por sus máximas garantías de calidad y seguridad alimentaria, que permita diferenciar a las producciones europeas en un mercado cada vez más competitivo.”
En este sentido, demandó a la comisaria Kyriakides dar un paso más en el etiquetado de productos como la leche y los derivados lácteos, las legumbres, el arroz o los frutos secos y que, además, se avance en la mejora de la indicación de la miel a nivel comunitario. “Urge indicar concretamente los países de recolección para la miel y sus mezclas, así como los porcentajes que cada miel representa”, ha destacado Planas.
Flujos comerciales
La reunión del ministro Planas con la comisaria Kyriakides se produjo en el marco del Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca de la Unión Europea, en el que se revisó la situación de la producción y los mercados agrarios afectados por la guerra en Ucrania, cuyo ministro de Agricultura, Mykola Solskyi, estuvo también presente en la sesión.
Luis Planas señaló que las materias primas se mantienen actualmente en niveles de precios aún superiores a los del inicio de la guerra en Ucrania, lo que, junto al incremento de los costes energéticos, tiene una influencia directa sobre la inflación y el coste de los productos alimentarios.
Al respecto, invocó sobre la necesidad de mantener los flujos comerciales con Ucrania para estabilizar las cotizaciones en los mercados y evitar movimientos especulativos indeseables, más aún en un momento en el que las producciones se ven también mermadas como consecuencia de la sequía que afecta a un buen número de países del Sur y el Centro de Europa.
Grano y fertilizantes
Planas recordó que, por efecto de las adversidades climáticas, en España se ha producido una merma en las cosechas de cereales y oleaginosas, dos de los productos precisamente más importados de Ucrania.
El ministro criticó que Rusia utilice los alimentos como un arma de guerra, “algo que es necesario impedir para evitar el desabastecimiento, especialmente en los países más vulnerables por su dependencia de los cereales de Rusia y Ucrania.”
Por ello, consideró vital continuar con el acuerdo alcanzado en julio para dar salida a grano ucraniano a través del Mar Negro para evitar una crisis alimentaria mundial.
Según el MAPA, hasta el 20 de septiembre salieron de Ucrania aproximadamente 4 Mt de maíz, trigo, cebada y otros productos, de las que han llegado a España unas 370.000 toneladas, hasta principios de septiembre.
Apuntó, a fecha de hoy, que España ha importado de Ucrania el 80 % de todo el grano que se importó en el año 2021, aunque la mayor parte de esas compras tuvieron lugar antes del 24 de febrero, antes del inicio de la guerra.
Planas afirmó también que la Unión Europea debe hacer los esfuerzos necesarios para ampliar el acuerdo, ya que concluye el próximo 31 de octubre, para que los corredores del comercio funcionen adecuadamente, “por el bien de Ucrania, pero también para mantener el abastecimiento de Europa y del resto del mundo”.
Por otro lado, una de las consecuencias más graves de la guerra entre Rusia y Ucrania en el sector agrícola es la que afecta al mercado de los fertilizantes. El ministro urgió, en este sentido, a que es necesario que se adopten medidas para favorecer la producción dentro de la Unión Europea, con el fin de reducir la dependencia de países terceros, entre los que Rusia era principal proveedor.
Planas señaló que muchas plantas de producción de fertilizantes europeas están en dificultades por los elevados precios del gas y abogó por la conveniencia de arbitrar medidas que faciliten a los agricultores la adquisición de productos fertilizantes ante las siembras de otoño e invierno.