El Grupo de Trabajo sobre Vino del COPA-Cogeca prevé que la producción vitivinícola de la UE-27 en la nueva campaña 2022/23 se mantenga más o menos estable respecto a la campaña anterior, pero sin alcanzar la media de los últimos 5 años (2017-2021).
No obstante, añade, habrá importantes disparidades dentro de un mismo país, como consecuencia de la sequía y de las elevadas temperaturas que se registraron durante los meses de primavera y verano.
No obstante, añade, habrá importantes disparidades dentro de un mismo país, como consecuencia de la sequía y de las elevadas temperaturas que se registraron durante los meses de primavera y verano.
El COPA-Cogeca, la organización que defiende los intereses de los profesionales agrarios y de sus cooperativas, espera que los tres principales países productores, Italia, Francia y España, produzcan en conjunto unos 130,2 millones de hectolitros, con un ligero aumento del 1,1% respecto de los 128,7 millones producidos en la anterior campaña 2021/22.
En cambio, se producirá una ligera caída de la producción vitivinícola del 2,1% sobre el promedio del lustro anterior, que alcanzó los 132,9 millones. En la mayor parte de los países productores se registran disminuciones en los rendimientos.
La vendimia de la actual campaña 2022/23 se caracteriza, en términos generales, por el impacto de las sequías y de las temperaturas abrasadoras, que azotaron toda Europa, que han llevado a adelantar la cosecha y a rendimientos inferiores a lo habitual.
En cambio, la parte positiva de estas adversidades meteorológicas es que las uvas se encuentran en muy buen estado fitosanitario, lo que presagia la producción de vinos de excelente calidad, según esta organización.
Luca Rigotti, presidente del Grupo de Trabajo del Copa-Cogeca sobre Vino, declaró al respecto que “aunque no es abundante, la cosecha vitivinícola de 2022 se ha “salvado”, en gran medida gracias a los esfuerzos de los propios viticultores.”
Sin embargo, añadió Rigotti, este año sigue siendo un reto para todo el sector vitivinícola, pues el aumento en los costes del transporte, del vidrio, del cartón, de los productos fitosanitarios y de la energía ha incrementado aún más los ya de por sí altos costes de producción y todo ello está erosionando aún más los márgenes de los productores”.
Para el presidente del GT del COPA-Cogeca, “las dificultades que traen consigo las sequías y las altas temperaturas en toda Europa han demostrado que los viticultores están comprometidos con la mitigación del impacto del cambio climático y en preservar el medio ambiente. Viticultores y cooperativas están innovando y aplicando buenas prácticas respetuosas con el medio ambiente (como la poda de los sarmientos, la aplicación de sistemas de riego eficientes y la reducción de los tratamientos fitosanitarios) sin comprometer la calidad de nuestros vinos”.
El COPA-Cogeca indica que, no obstante, las cifras previstas están todavía sujetas a posibles cambios, en vista de las condiciones climáticas que determinarán las próximas semanas de vendimia, especialmente en lo que respecta a la productividad de las variedades de uva de maduración media-tardía.
Situación por país
En Italia, esta organización espera una producción estable en comparación con la campaña de comercialización anterior, a pesar de los fenómenos meteorológicos adversos, especialmente sequías y altas temperaturas. La falta de precipitaciones ha facilitado el control de las enfermedades fúngicas, reduciendo así el número de intervenciones fitosanitarias.
En Francia, después de una cosecha muy baja el pasado año, diezmada por las heladas de primavera, se pronostica que la producción de vino se recuperará. Se producirán aproximadamente 44 Mhl, con un aumento del 16,2% con respecto a 2021.
En muchas regiones, la cosecha comenzó inusualmente pronto, debido a las altas temperaturas. Las heladas primaverales, seguidas de las tormentas de pedrisco y olas de calor, afectaron principalmente a los viñedos de las regiones Suroeste y al Charentes. La falta de lluvias y las altas temperaturas en verano han reducido los volúmenes esperados en varias regiones, mientras que la sequía los ha recortado en otras.
En España, las temperaturas abrasadoras y las sequías afectaron a los viñedos, que sufrieron también la falta de lluvias y de agua (la capacidad de los embalses ha caído al 36,9% desde el 55,6% promedio).
Al igual que en Italia y Francia, la cosecha de 2022 se adelantó en 2-3 semanas, debido al clima seco, que ha contribuido a uvas de buena calidad y libres de enfermedades.
En Portugal se prevé que la producción alcance los 6,7 millones de hectolitros. La disminución del 9% en comparación con la campaña de comercialización anterior 2021/22 se debe a la escasez de agua y a las altas temperaturas, que afectaron a la maduración de la uva. Las uvas muestran un buen estado fitosanitario, sin registros de plagas o enfermedades.
En Hungría, las sequías de invierno y verano, especialmente durante el desarrollo de la vegetación, afectaron a los rendimientos. Se espera que las precipitaciones de finales del verano y principios del otoño limiten la caída de la producción a casi el 20%.
En Austria, es probable que la sequía y el calor conduzcan a una ligera disminución de la producción (-2,5%) en relación a la campaña anterior de 2021/22 y al promedio de los últimos cinco años.
En Eslovenia, se espera que la producción de vino se reduzca en un 14% en comparación con la campaña anterior 2021/22, que ya era baja debido a las heladas de primavera, y en un 30% frente al promedio del lustro anterior. La razón principal que explica la disminución es la sequía que afectó a todas las regiones vitivinícolas del país.
En Países Bajos, el buen tiempo experimentado en 2022 ha llevado a menos enfermedades y, como resultado, se espera que la producción de vino en los Países Bajos aumente en un 10%.
En Grecia, las continuas y fuertes lluvias en Grecia están afectando la cosecha, que se prevé que sea inferior a la prevista inicialmente. Sin embargo, no hay cifras disponibles debido a que la situación sigue evolucionando.
La cosecha aún está en curso en Alemania y Luxemburgo. Como la situación es muy heterogénea, aún no se dispone de datos sobre el rendimiento, según el COPA-Cogeca.