UPA, Unión de Uniones y Asaja, en desacuerdo con la Directiva de Emisiones Industriales
Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos y UPA han mostrado esta semana su desacuerdo con la Directiva de Emisiones Industriales, recientemente acordada por la Comisión Europea, el Consejo y el Parlamento Europeo y cuyo objetivo es reducir la contaminación de las emisiones de la industria y de la grandes explotaciones ganaderas intensivas.
UPA califica de “ataque contra la ganadería familiar” los términos en los que se está especificando de esta directiva, y hace además un llamamiento al Consejo de Ministros de Medio Ambiente para que rebajen el impacto de esta normativa en la ganadería, especialmente en las granjas avícolas y porcinas de carácter familiar.
Insisten desde la organización en que, aunque “el texto ha mejorado respecto al que salió de la Comisión Europea”, la Directiva, de aprobarse tal y como sale de la Eurocámara, supondría restricciones, dificultades de adaptación y sobrecostes para miles de granjas. “Esta normativa generará problemas en miles de granjas en España de los sectores porcino y avícola”.
Por su parte Unión de Uniones alertaba este miércoles de que el acuerdo de Directiva de Emisiones aprobado por los eurodiputados es “inasumible para las medianas y pequeñas granjas avícolas y porcinas”.
Recuerdan que ya denunciaron en su día que los umbrales negociados para porcino y avícola supondrían ampliar las exigencias hasta unos límites que alcanzan a granjas de mediano-pequeño tamaño, lo que “incrementaría la carga burocrática, los costes de gestión y niveles de inspección a las granjas que apenas cuentan con una UTA (persona dedicada a tiempo completo durante un año a la actividad agraria), por lo que las exigencias pasarán a ser inasumibles para este rango de granjas”.
Asimismo, la organización advierte que, rebajar los umbrales apenas conllevará una mejora, al ampliar muy poco el censo cubierto, mientras que el coste social y económico tendrá un gran impacto negativo, al afectar a un elevado número de granjas de tamaño pequeño o mediano.
Asaja, también comunicaba su desacuerdo con la decisión europea de no enmendar el texto. «Esta decisión envía una señal clara y desalentadora a los sectores productores tradicionales de Europa, incluyendo a nuestros agricultores y ganaderos». Señalaban tras conocer la votación que, «este resultado es profundamente decepcionante para Asaja y para miles de explotaciones familiares de porcino y aves de corral que enfrentan ahora una regulación injusta e insensible».
Para la organización es «desalentador observar cómo las desavenencias políticas han contaminado cada etapa de este proceso, justo en el momento crucial previo a las elecciones. Nos enfrentamos a una falta de apoyo visible tras votaciones como esta por parte de algunos partidos políticos, quienes siguen sin ser conscientes que el destino de nuestros agricultores está en sus manos. Se trata pues de una afrenta a la estabilidad y prosperidad de nuestras comunidades agrícolas».