El comisario de Agricultura y Desarrollo Rural de la UE, Janusz Wojciechowski, ha señalado en una respuesta parlamentaria a la eurodiputada vasca, Izaskun Bilbao que, "si bien las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de la agricultura son menores que las de otros sectores de la economía, deben proseguir los esfuerzos para mejorar la sostenibilidad del sector, como parte de los esfuerzos globales de la UE para cumplir las disposiciones del Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). de Naciones Unidas."
Wojciechowski: «el agro debe proseguir sus esfuerzos para reducir emisiones GEI y mejorar su sostenibilidad»
Según el comisario, «la Política Agraria Común (PAC) garantizará, como en el pasado, que la seguridad alimentaria y el sustento de los agricultores no se vean amenazados por estos esfuerzos, sino que, por el contrario, puedan aprovechar plenamente estas oportunidades.»
Más en concreto, en respuesta a las estimaciones del coste que puede acarrear la comentada deslocalización de algunas producciones, Wojciechowski argumentó que «los ejercicios de modelización actuales para estimar los costes de la deslocalización de la producción fuera de Europa (fuga de carbono) producen resultados con niveles de incertidumbre y variabilidad muy elevados y aún deben mejorarse.»
El comisario hace referencia en su respuesta al último informe anual de la Agencia Europea de Medio Ambiente sobre el inventario de GEI de la Unión Europea y señala que las emisiones de la agricultura comunitaria representan el 10% del total de las emisiones de GEI de la UE a la atmósfera, y las emisiones de metano procedentes de la ganadería de la UE, el 43% de las emisiones totales de la agricultura comunitaria.
«Las emisiones de metano (CH4) del sector ganadero de la UE-28 disminuyeron un 21,2% entre 1990 y 2017, y las emisiones de este gas contaminante a la atmósfera, procedentes de la fermentación entérica del ganado bovino se redujeron un 21% en el mismo periodo, mientras que la producción de lácteos aumentó y la producción de carne de vacuno se mantuvo estable», señaló Wojciechowski.
Según el comisario, «las emisiones de GEI procedentes de la agricultura comunitaria consisten en metano y óxido nitroso (distintos del CO2) y se gestionan mediante el Reglamento de reparto del esfuerzo. La capacidad de compensación de los pastos (CO2 almacenado) está cubierta por las disposiciones de la Decisión sobre el Uso de la Tierra, el cambio del Uso de la Tierra y la Silvicultura (UTCUTS) y parte del inventario de GEI de la Unión Europea, que abarca todas las emisiones y absorciones de la UE.
Medidas compensatorias
La eurodiputada vasca, Izaskun Bilbao Barandica (Grupo Renew Europa, Partido Nacionalista Vasco) preguntaba a la Comisión Europea si esta institución pensaba asumir la defensa argumental y económica de la ganadería europea frente al discurso sobre sus emisiones GEI, que perjudica a los productores, y si pensaba ponderar en su análisis la capacidad de los pastos para compensarlas.
Según Bilbao, en los últimos años se ha extendido el mantra de que la producción ganadera es una de las grandes fuentes de emisiones de GEI en la UE. Sin embargo, estudios del COPA-Cogeca certifican que solo el 5% son imputables a la ganadería. Además, en los últimos años las emisiones ganaderas han descendido un 22%.
Además, el 33% de la Superficie Agrícola Útil (SAU) total de la UE son pastos capaces de retener hasta un 45% de las emisiones GEI Ganaderas. Estas cifras conectan con una reducción constante de los animales de producción. Solo el ganado bovino se ha reducido un 25% desde 1990 y se espera otro recorte del 8% hasta 2030, según la eurodiputada.
Pese a que el incremento de productividad compensa estos descensos, en algunos sectores (leche), en otros (carne), la producción se está trasladando a otras regiones, que carecen de los requisitos medioambientales, de bienestar y sanidad animal euros, con el temor de los costes que pueda acarrear esta deslocalización productiva, añade Izaskun Bilbao.