La bioeconomía, una alternativa que permitirá una mayor sostenibilidad en el uso de los recursos naturales
La directora general de Desarrollo Rural y Política Forestal del Magrama ha apostado en la inauguración del curso “Gestión y financiación de proyectos de bioeconomía” , organizado por el Ministerio de Economía y Competitividad, por la bioeconomía como una alternativa viable para dirigir la economía en una dirección que permita una mayor sostenibilidad en el uso de los recursos naturales.
Representa, ha explicado, una gran oportunidad en el ámbito agroalimentario y forestal de este país, ya que se trata de sectores productivos y transformadores que dotarán a este nuevo sistema económico de materias primas, ya sea con fines alimentarios, ya sea para aprovechamiento de subproductos o para generar nuevos usos, como la bioenergía.
Nieto ha señalado que el objetivo es producir más alimentos, generar más riqueza, crear más empleos e impulsar los intercambios comerciales, pero haciendo un uso inteligente y racional de los recursos naturales que tenemos a nuestro alcance.
En definitiva, ha añadido, se trata de producir más con menos, siguiendo las nuevas orientaciones que en la UE se están adoptando para impulsar el crecimiento económico, haciendo un uso más efectivo y racional de los recursos naturales.
En esta línea ha asegurado que el desarrollo de la bioeconomía también es una oportunidad para lograr una economía más innovadora y con bajas emisiones, que concilie las demandas de gestión sostenible de la agricultura y una economía baja en carbono con la seguridad alimentaria y la utilización sostenible de los recursos renovables, garantizando la biodiversidad y la protección del medio ambiente.
Para lograr esos objetivos, ha incidido en la necesidad de emplear la investigación y la innovación como motores de cambio, porque se han convertido en herramientas imprescindibles para ser competitivos. Para su aplicación ha destacado la importancia de contar con apoyo financiero, que puede venir del sector público, a través de ayudas o instrumentos financieros procedentes de fondos europeos, nacionales o autonómicos, y del sector privado.
A nivel europeo, la directora general ha recordado que la Comisión impulsó en 2012 una estrategia específica sobre bioeconomía, dirigida a orientar la economía europea hacia un uso mayor y más sostenible de los recursos renovables. También ha destacado la estrategia Europa 2020, con objetivos concretos para que la Unión Europea se convierta en una economía inteligente, sostenible e integradora en la próxima década, centrándose en cinco objetivos muy concretos en empleo, innovación, educación, inclusión social y clima y energía.
Por otra parte, Nieto ha planteado las posibilidades que ofrece el Programa Marco de Investigación e Innovación Horizonte 2020, que va a destinar 3.851 millones de euros al I+D+i en temas relacionados con la agricultura y la bioeconomía y 3.051 millones de euros al medio ambiente.
Y junto a estas iniciativas, el nuevo Reglamento de desarrollo rural 2014 – 2020 en el marco de la Política Agrícola Común, dónde se introduce la innovación como una prioridad transversal, indispensable para lograr los objetivos de la política rural europea.
Para ello, ha señalado, se ha creado la Asociación Europea de Innovación de agricultura productiva y sostenible, que se encargará de impulsar la innovación en el sector agroalimentario y forestal. Su objetivo, ha indicado, es aplicar todo el conocimiento científico generado de una forma eficiente en este sector, para solucionar los problemas reales de productores, cooperativas e industrias a través de proyectos innovadores.
España, ha afirmado Nieto, está en condiciones de competir y orientar las inversiones en proyectos que contribuyan a resolver problemas específicos del sector agrario y de nuestro territorio. Para ello, ha concluido, es importante aprovechar todas las oportunidades ofrecidas por las políticas europeas y dar coherencia a los esfuerzos realizados.