La campaña 2018/19 se dio por concluida el pasado 30 de septiembre con unas salidas de aceite de oliva al mercado de algo más de 140.000 toneladas, según las cifras avanzadas, muy provisionales aún, de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA).
Salidas récord al mercado de más de 140.000 t de aceite de oliva en septiembre, fin de 2018/19
Con los datos, que son récord histórico para un mes de septiembre desde que se tienen registros, las salidas acumuladas al mercado durante toda la anterior campaña 2018/19 fueron de algo más de 1,55 Mt, un 14,5% más que en la campaña anterior, con algo más de 129.300 toneladas de media mensual.
Las exportaciones estimadas de aceite de oliva habrían alcanzado alrededor de 95.000 t, acumulando unas ventas al exterior en el conjunto de la campaña de más de 1,01 Mt, un 14,3% más que en 2017/18.
Por su parte, las salidas al mercado interior aparente sumaron en septiembre unas 45.340 toneladas, acumulando en la campaña 538.830 t, cerca de un 15% más que en la campaña anterior.
La producción total de aceite de oliva en 2018/19 ronzó los 1,79 Mt, con un incremento del 41,8% sobre una campaña antes. Si a este volumen sumamos casi 375.000 t de stock de inicio de campaña (1 de octubre de 2018) y unas importaciones estimadas de casi 143.500 t (-12,5%), tras calcular 9.000 t importadas en septiembre, las disponibilidades de oferta en toda la campaña pasada fueron de casi 2,31 Mt, un 33,4% más que en 2017/18.
Las existencias finales de aceite de oliva, con que se habría cerrado la campaña a 30 de septiembre fueron de 756.800 toneladas, un volumen que se dobló prácticamente en relación al stock final de 2017/18 y que garantizará que no haya problema ninguno para enlazar con la nueva campaña y tener una oferta suficiente para atender al mercado interno y también internacional en estos dos próximos meses y, al menos, hasta la llegada de la nueva producción oleícola.
De este volumen de fin de campaña, unas 531.100 t estarían en almazaras; apenas 29.430 t, una cifra bastante baja, en los depósitos del Patrimonio Comunal Olivar, y algo más de 196.000 t de aceite de oliva en poder de envasadores y otros operadores comerciales.
Resumen
En resumen, acaba una campaña muy difícil con algunos hitos que destacar: una producción de aceite de oliva récord de casi 1,8 Mt; unas importaciones que, pese a este récord de producción, han superado las 140.000 t, debido sobre todo a las compras realizadas en los meses iniciales de la misma; unas salidas al mercado de 1,55 Mt, que son de las mejores en los últimos años, pero que deberían haber sido incluso más altas, dados los bajos precios en origen y los descensos de la oferta en otros principales países productores; unas ventas al mercado interior que, de nuevo, posiblemente por los precios, superaron el medio millón de toneladas; una exportación de más de un millón de toneladas, que se queda por debajo del récord de la campaña 2013/14, que superó los 1,1 Mt, pero que es la segunda cifra más importante y, por último, unas existencias que son elevadas, pero que compensarán la importante caída de más del 30% (entre 500.000 y 600.000 t menos) de la producción oleícola interna en la campaña 2019/20.
Punto negro
El punto negro de la campaña 2018/19 fueron los precios en origen granel salida almazara, que apenas superaron una media de 2 €/kg, frente a los 2,4-2,8 €/kg en que están cifrados los costes de producción, siendo de 2,1-2,2 para el AOVE; de poco más de los 2 €/kg para el virgen, aunque con semanas por debajo de ese suelo, y de menos de esa cifra y hasta 1,95 €/kg para el lampante destinado a refino.