La CE no elevará del 5% al 7% el porcentaje obligatorio de SIEs en tierras de cultivo de más de 15 hectáreas
Un informe de la Comisión Europea muestra que las Superficies de Interés Ecológico (SIE o EFAs en sus siglas en inglés) pueden contribuir a abordar el impacto de algunas prácticas agrícolas sobre el medio ambiente, trayendo potenciales efectos positivos para la biodiversidad y para el suelo, el agua y el clima.
El informe abarca los dos primeros años desde la introducción de las SIEs en 2015 a través de nuevas normas que regulan los pagos directos a los agricultores.
Los agricultores con tierras de cultivo de más de 15 ha deben asegurarse que, al menos, el 5% de esta tierra sea una zona de interés ecológico. Esta obligación de los agricultores de establecer SIEs en parte de sus tierras se aplica a la gran mayoría de las tierras cultivables de la Unión Europea (alrededor del 70%).
El 30% restante está exento por diversas razones, que van desde el tipo de cultivo (agricultura ecológica) y la forma en que es utilizada la tierra (es decir, si ya hay un alto porcentaje de pastizales en una explotación) hasta la ubicación de la explotación (en particular las del norte).
En 2015 casi 8 millones de hectáreas de tierra fueron declaradas como SIEs, que representan el 10% de las parcelas obligadas, después de tener en cuenta el impacto sobre la biodiversidad. Esto es el doble del 5% requerido por la legislación comunitaria a nivel de parcela. Los datos de 2016 muestran resultados muy similares.
Las SIEs pueden adoptar diversas formas y corresponde a las autoridades nacionales decidir cuáles son las más adecuadas a las circunstancias de cada país. Los agricultores pueden, por tanto, elegir de su lista nacional que tipos de SIEs adoptarán en sus tierras.
Las características de las SIEs pueden ser tales como las tierras en barbecho, los márgenes entre parcelas, setos y árboles o bandas de protección que benefician directamente a la biodiversidad; También pueden incluir áreas productivas específicas cuyo efecto sobre la biodiversidad es indirecto a través de un menor uso de insumos como fertilizantes.
El informe muestra que las formas más comunes de SIEs elegidas por los agricultores son aquellas consideradas «productivas» – es decir, donde la tierra se siembra con cultivos «fijadores de nitrógeno», como la alfalfa (que ayudan a mejorar el contenido de nitrógeno del suelo y reducen la necesidad de Fertilizantes), o mediante cultivos de captura (cultivos de crecimiento rápido entre plantaciones de los principales cultivos que capturan el exceso de nitratos). La otra forma habitual de SIE es dejar la tierra está en barbecho.
Estos tres tipos de SIEs corresponden a más del 90% del total. En contraste, otras SIEs, que incluyen características del paisaje (tales como márgenes de campo, árboles o setos) o hileras o bandas de amortiguación, se han aplican en menor medida.
Los primeros conocimientos sobre los efectos ambientales de las SIEs muestran que, si bien por lo general son potencialmente beneficiosas para la biodiversidad y también para las funciones de los ecosistemas (como la polinización, el control de plagas y enfermedades, la composición química del agua dulce y la erosión del suelo), algunos tipos de SIEs son más beneficiosos que otros.
Así, las SIE que consisten en preservar las características del paisaje y aquellos donde la tierra está en barbecho son los más efectivos, mientras que los SIEs donde hay cultivos de captura son relativamente menos efectivos.
Resultados diferentes
El informe indica que los resultados también pueden diferir dependiendo de factores como la cobertura del suelo, las especies sembradas y la diversidad de la vegetación, el período de retención, la ubicación de las características y el uso de insumos químicos.
Por ejemplo, para las SIEs en tierra en barbecho, el cultivo de flores silvestres tiene un mayor impacto para los insectos polinizadores, mientras que dejar el suelo completamente desnudo tiene un impacto más bajo. El suelo desnudo también puede tener impactos negativos debido al mayor riesgo de erosión del suelo. Además, se ha demostrado que mantener la tierra en barbecho durante un largo período de tiempo y no utilizar pesticidas reduce la afección sobre los hábitats, en particular durante el período de cría de aves.
La distribución actual de los tipos de SIEs y el manejo de cada uno de ellos influyen en la eficacia ambiental de estas superficies de particular interés. Los nuevos reglamentos delegadas sobre los SIE que, actualmente, están sometidas a examen por los colegisladores en el Consejo y el Parlamento Europeo, deberían abordar estos aspectos, mejorando las prácticas de gestión, tales como el establecimiento de períodos de retención para algunos tipos de SIE; introduciendo una prohibición del uso de productos fitosanitarios en las SIEs productivas y potencialmente productivas.
Por otro lado, la racionalización de los requisitos relativos a los tipos de SIEs más beneficiosos para el medio ambiente, como las características del paisaje, debería alentar a los agricultores a utilizarlos de manera más amplia.
La evaluación de la Comisión sobre la aplicación de las SIE forma parte del acuerdo con los colegisladores del Consejo y del Parlamento Europeo para determinar si el umbral mínimo de las tierras reservadas a nivel de explotación para estas superficies debería incrementarse del 5% al 7%.
La evidencia recogida en el informe muestra que la cantidad de tierra utilizada para las SIEs (en promedio) es ya superior a esta propuesta más alta y, a la luz de esto, la Comisión ha decidido no proponer aumentar el umbral.
Reacción sectorial
El Copa-Cogeca acogió favorablemente hoy en Bruselas la decisión de la Comisión de la UE de mantener la tasa de Superficies de Interés Ecológico (SIE) en el 5%, según anuncia en su informe.
El informe de evaluación de la Comisión hace hincapié en que las superficies de interés ecológico (SPI) pueden contribuir a la mejora de la biodiversidad y a apoyar los servicios al ecosistema. Esta revisión se ha realizado en el marco de la última reforma de la Política Agrícola Común (PAC) y abarca los primeros dos años de su aplicación.
Según las normas aplicables a las SIE, los agricultores que tengan más de 15 hectáreas deben asegurarse de que el menos el 5% de sus tierras constituyen superficies de interés ecológico. En 2015, el 10% de las tierras a las que se aplicaba esta decisión fueron declaradas SIE y los datos de 2016 arrojan resultados muy similares.
El mismo informe indica que los agricultores optan por cultivos fijadores de nitrógeno, por cultivos intermedios y por dejar las tierras en barbecho para cumplir con las SIE. También se puede aplicar la medida de otras formas, como dejando determinados elementos del paisaje, como las lindes, los árboles, setos y franjas de protección.
En reacción al informe, el secretario general del COPA-Cogeca, Pekka Pesonen, declaró que «es buena noticia para los agricultores que la Comisión haya decidido mantener la tasa de SIE en el 5% y no incrementarla al 7%, ya que en la actualidad las tierras constituidas en SIE están superando claramente el 7%.
Por tanto, bienvenida esta decisión, aunque todavía nos sigue preocupando mucho la prohibición del uso de productos fitosanitarios en todas las zonas potencialmente productivas de las SIE.
Efectivamente, este requisito no deja de plantear problemas tanto agronómicos como administrativos; lo cual es particularmente preocupante, ya que tanto los agricultores como las administraciones públicas deben animarse a cumplir las medidas de la ecologización de la PAC y a incrementar la aceptación de las mismas».
Foto: www.unionclm.org