La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha presentado hoy su primera Memoria de Sostenibilidad para dar cuenta del compromiso que mantiene la industria de alimentación y bebidas con el Desarrollo Sostenible y la responsabilidad del sector con el entorno en el que actúa.
Este Informe, elaborado por la consultora KREAB con el apoyo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), recoge las principales iniciativas, avances y oportunidades en materia de sostenibilidad, además de ser una hoja de ruta sobre los ejes estratégicos en los que las empresas del sector tienen que enfocar su actividad.
La presentación de la Memoria ha estado a cargo de José Miguel Herrero, director general de Industria Alimentaria del MAPA, y Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB,quienes han puesto en valor la importancia estratégica del avance hacia una industria cada vez más sostenible y los esfuerzos que se realizan desde el sector en favor de la consecución de modelos de trabajo cada vez más eficientes y respetuosos con el entorno.
Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB, ha asegurado que los fabricantes de alimentos “dan respuesta a las necesidades de una sociedad cada vez más consciente y comprometida con la sostenibilidad, a través de distintas iniciativas que abordan el desarrollo sostenible desde un enfoque holístico, teniendo en cuenta todas sus vertientes: económica, social y medioambiental”.
El director general de FIAB se ha referido a medidas legislativas como el Real Decreto de Envases y Decretos de Envases, que con su actual redacción obligaría a inversiones inesperadas e inasumibles por la industria, que se elevarían a 6.270 M€ para adaptarse a los nuevos objetivos de reutilización y hacer frente a la reducción del 50% de botellas de bebidas de plástico de un solo uso a 2030. Esto, unido al incremento del coste de la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP), 490 M€, y al impuesto al plástico, 300 M€, representaría para el sector un impacto de más de 7.000 M€
La medida abocaría al cierre de 2.400 compañías ─más del 7% del total de la industria─, principalmente pymes y empresas ubicadas en el medio rural, por lo que Mauricio García de Quevedo ha vuelto a tender la mano al Ejecutivo para “avanzar coordinados en la búsqueda de modelos cada vez más eficientes y sostenibles, pero siempre sin perjudicar la competitividad de las empresas”.
Desde el año 2014, la industria de alimentación y bebidas ha reducido en un 8,2% sus emisiones y ha mejorado su eficiencia energética en un 13,4%, además de haber reducido en hasta un 20% el consumo hídrico, lo que equivale a un ahorro de 14 millones de m3de agua. Asimismo, ya en 2019 el 9,2% del total de la energía consumida en el sector procedía de fuentes renovables.
Los elaboradores de alimentos y bebidas españoles, además, apuestan por la circularidad y enfocan gran parte de sus estrategias en avanzar hacia un modelo de economía circular. Por ejemplo, desde el año 2014 se ha reducido la generación de residuos en un 10,3%. Esto equivale a un ahorro de más de 721.000 toneladas de residuos. Por otro lado, tres de cada cuatro empresas aprovechan los subproductos que se generan en sus procesos productivos y cuatro de cada cinco cuentan con acuerdos para la donación de excedentes alimentarios.
También la industria de alimentación y bebidas, por sus características, tiene capacidad para impactar de forma positiva en todos y cada uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas contemplados en la Agenda 2030. Por ello, entre los principales retos y objetivos del sector, está el de integrar estas metas de sostenibilidad en el centro de las estrategias de desarrollo y crecimiento.
Los fabricantes de alimentos y bebidas con conscientes de la importancia que tiene transitar hacia modelos de producción cada vez más sostenibles y por eso el sector combina cuatro ejes de actividad ─económico, social, medioambiental e innovador─ para dar respuesta a las exigencias en materia de sostenibilidad y desarrollar un plan estratégico a modo de hoja de ruta para el sector, con el objetivo de avanzar hacia modelos de negocio más sostenibles y eficientes.