La Organización Mundial del Comercio (OMC) comunicó a finales de la pasada semana y de forma confidencial a las partes el informe de arbitraje sobre el caso Boeing, que se hará público en las próximas semanas, probablemente el próximo 13 de octubre en Ginebra, sede de esta institución.
La OMC comunica a la CE la posibilidad de imponer 4.000 M$ de aranceles adicionales a EE.UU. por el caso Boeing
Distintos medios señalaron que el importe de las contramedidas arancelarias que la Unión Europea podría imponer a Estados Unidos podría ascender a unos 4.000 millones de dólares, una cifra inferior a los 7.500 millones de dólares que la OMC permitió a Estados Unidos imponer a productos de la UE en el caso Airbus, y también inferior a lo que la propia Comisión Europea venía barajando en una lista de bienes exportados por parte de EE.UU., que podrían ser objeto de incrementos arancelarios, entre los que se incluirían también productos agroalimentarios.
Una vez que se publique el laudo arbitral, el Órgano de Solución de Diferencias (ODS) de la OMC adoptará una decisión para autorizar a la Unión Europea a imponer medidas de retorsión comercial por el importe señalado. En principio, esto podría suceder el 26 de octubre, que es cuando está prevista una nueva reunión del ODS y en esa fecha la UE podría dar a conocer la lista de productos americanos afectados por el incremento de aranceles.
De cualquier forma, tanto la Comisión Europea, como las asociaciones que representan los intereses de las productos que están sufriendo en sus ventas el incremento del 25% de los aranceles por parte de Estados Unidos desde hace casi un año, como los del sector de aceite de oliva y de la aceituna de mesa, así como el vitivinícola y otros, consideran que es preferible no reaccionar de manera brusca para evitar una escalada de la tensión comercial aún mayor de la existente.
Por tanto, todo hace pensar que, pese al esperado anuncio, que abre la puerta a que la UE pueda imponer subida de aranceles a productos importados a Estados Unidos, la Comisión Europea abrirá un compás de espera, de tiempo aún no determinado para ver cuál es, en primer lugar, la reacción de la parte norteamericana a la decisión de la OMC, cuando solo queda apenas un mes para unas elecciones en ese país, que resultarán clave para decidir el futuro del Gobierno de Trump y, en función, de todo eso, actuar luego en consecuencia.