El Colegio de Comisarios de la Unión Europea aprobó, como estaba previsto, la cláusula de salvaguardia sobre las importaciones de arroz procedentes de Camboya y Myanmar/Birmania, por el aumento considerable de las envíos a muy bajo precio.
La UE reintroduce la cláusula de salvaguardia a la importación de arroz de Camboya y Myanmar
De esta manera, se reintroducen los aranceles a las importaciones de este cultivo agroindustrial durante tres años. Esta medida podría entra en vigor este 18 de enero, tras su publicación en el Diario Oficial de la UE (DOUE).
Durante la investigacion, que la CE inició en marzo de 2018, se constató que el conjunto de las importaciones de arroz del tipo «Índica» o largo, procedente de estos dos países, había aumentado un 89% en las últimas campañas. Asimismo, puso de manifiesto que los precios -del arroz importado de esos orígenes- eran sustancialmente más bajos que los del mercado comunitario e incluso habian disminuido durente el mismo periodo. Este gran incremento de las importaciones a bajo precio ha causado, según la CE, graves dificultades a los productores de arroz de la Unión Europea, cuya cuota de mercado interno se redujo de forma sustancial del 61% a solo el 29%.
La Comisión señala que Camboya y Myanmar/Birmania son beneficiarios del régimen comercial preferencial «Todo Menos las Armas» (EBA, en sus siglas en inglés) de la Unión, que concede unilateralmente un acceso libre de derechos y contingentes a los países menos desarrollados del mundo (excepto por armas y municiones). Este es uno de los pilares del sistema de reducción de aranceles del Sistema de Preferencias Generalizadas sobre la base del mecanismo de salvaguardia del Reglamento SPG.
La solicitud inicial de establecer salvaguardias comerciales frente a las importaciones de arroz fue presentada en febrero de 2018 por el Gobierno italiano, apoyado por los demás Estados miembros productores (España, Francia, Portugal, Grecia, Hungría, Rmania y Bulgaria). La CE abrió una investigación formal el 16 de marzo de 2018 y las medidas aprobadas ahroa se aplicarán durante un periodo de tres años.
La reintroducción del derecho arancelario funcionaría con 175/t en el primer año; 150 €/t en el segundo y 125 euros/t en el tercero, consecutivamente para cada periodo, es decir, se irán reduciendo de forma constante durante este periodo.
“Esto se traduciría en una subida significativa del precio de cada tonelada para el agricultor, haciendo mucho más rentable este cultivo”, según el secretario general de UPA-UCE de Extremadura, Ignacio Huertas.
Esta organización agraria ha estado personada en la investigación que llevó a cabo la Comisión Europea para determinar las consecuencias de estas importaciones.
“Siempre hemos defendido que la medida se tenía que hacer afectiva en esta campaña, así que deseamos que sirva para que los agricultores arroceros reciban precios más justos ya en este ejercicio”, explican desde UPA-UCE.
Hasta ahora, casi el 60% del arroz que importaba la UE no pagaba ningún tipo de arancel pero, a partir de que se haga efectiva la decisión comunitaria, el producto que entre en Europa, procedente de Camboya y Myanmar, tendrá que pagar casi 200 euros durante los próximos tres años.
“Esto ayudará a que nuestros arroceros puedan respirar tranquilos, al menos durante este periodo”, apunta Huertas.
La restauración de esta medida se ha convertido en un reclamo constante de UPA-UCE, debido a los graves problemas de rentabilidad que causan las masivas importaciones de arroz a los productores e industria de toda Europa.
Extremadura acumula el 23% de toda la producción nacional de arroz, lo que nos sitúa como segunda comunidad productora de este cultivo en toda España con casi 25.000 hectáreas dedicadas a este cultivo, especialmente en las Vegas Bajas del Guadiana.
Desde UPA-UCE se señala que la investigación llevada a cabo por la Comisión Europea puso ya de manifiesto que el arroz es un cultivo sensible al precio y que la rápida expansión de estas importaciones se ha traducido en una bajada de las cotizaciones en el mercado europeo tanto para los productores, como para toda la industria de la UE. Por ello aplaudimos que la respuesta haya sido restaurar las medidas arancelaria.
Sentar precedente
Según la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), en las últimas cinco campañas se han multiplicado por 40 los envíos de arroz desde estos países asiáticos, al pasar de 9.000 t en 2012 a 360.000 en 2017, provocando un hundimiento de las cotizaciones de dicho cereal cultivado en Europa.
Al respecto, esta organización agraria señala que la decisión adoptada por el Ejecutivo comunitario reviste una enorme trascendencia ya que, por una parte, es la primera vez que se pone en marcha un instrumento de esta naturaleza para defender un producto agrario no transformado europeo ante la competencia desleal de terceros países y, de otro lado, porque sienta un precedente que puede hacerse extensivo a otros cultivos que, como en el caso de los cítricos, atraviesan dificultades similares a las que ha venido sufriendo el colectivo arrocero durante los últimos tiempos.
Esta Asociación valora en términos altamente positivos la plasmación de esta reivindicación histórica, porque va a suponer una válvula de oxígeno para los arroceros, en la medida en que debe permitir restaurar el equilibrio en el mercado europeo del arroz, seriamente distorsionado y comprometido por los efectos de los acuerdos comerciales preferentes firmados entre la Unión Europea y determinados países asiáticos.
Buena prueba de ese impacto negativo que han reportado dichas concesiones queda patente en el descenso del 15% experimentado en los precios percibidos por los arroceros valencianos, mientras que la caída ha alcanzado el 30% en otras regiones productoras como Italia.
En la consecución de este logro, AVA-ASAJA afirma haber tenido un protagonismo destacado, ya que durante los últimos años ha impulsado a través del COPA-COGECA –entidad que aglutina a organizaciones y cooperativas agrarias de la UE– la necesidad de plantear ante las autoridades comunitarias una clausula de salvaguarda para el sector arrocero.
El dirigente de la Asociación, Miguel Minguet, a su vez vicepresidente del Grupo de Trabajo del Arroz del COPA-COGECA en representación de ASAJA, es el único representante español que ha participado en todas las reuniones de alto nivel celebradas en Bruselas.
El trabajo llevado a cabo, con el respaldo de la oficina de ASAJA en Bruselas, hizo posible que en diciembre un total de 13 países, entre ellos los principales productores como España, Italia, Portugal, Francia y Grecia, votaran a favor de esta exigencia del sector que hoy finalmente ha adoptado la Comisión Europea
Ahora los cítricos
AVA-ASAJA reitera que la decisión sienta un precedente que puede abrir un camino para otras producciones agrarias. En este sentido, la organización destaca el papel fundamental que desempeñó el gobierno italiano desde el primer momento en las gestiones para lograr la implantación del referido mecanismo de salvaguarda en el arroz.
Tal consecución ha sido posible gracias a un trabajo previo de documentación y elaboración de informes para acreditar los efectos negativos de esas importaciones sobre el mercado arrocero europeo, acompañado de las necesarias presiones en el ámbito político.
Es por ello que el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, señala que el Gobierno español tiene que tomar buena nota de la actitud de su homólogo italiano y reclama al MAPA que no desaproveche este precedente y encabece de modo decidido todas las actuaciones necesarias para plantear ante la UE la posibilidad de aplicar una cláusula de salvaguarda también en los cítricos, frente a la competencia desleal que están sufriendo de otros países y fundamentalmente de Sudáfrica.
Origen y sostenibilidad
La cláusula de salvaguardia a las importaciones de arroz tipo indica procedentes de Camboya y Myanmar entra en vigor este 18 de enero.
La decisión adoptada por el Colegio de Comisarios de la UE tiene su origen en una denuncia presentada por Italia en febrero de 2018 y apoyada por los demás Estados miembros arroceros, entre ellos España, que motivó una investigación por parte de la Comisión Europea en la que se concluyó que el arroz índica de Camboya y Myanmar se importa en volúmenes y a precios que causan graves dificultades a la industria y a los productores europeos.
Los consumidores españoles también se verán beneficiados por esta medida, porque al reducir las importaciones, se garantiza un mayor origen de arroces producidos en España y la UE, que tienen una mayor calidad, con una producción más sostenible.
Félix Liviano, presidente del Consejo sectorial de Arroz de Cooperativas Agro-alimentarias de España, valora la decisión, pero señala que es una solución temporal, por lo que el sector cooperativo continuará trabajando con el Ministerio en otras medidas, como el etiquetado de origen del arroz, que beneficia al consumidor que así puede conocer el origen de lo que come y porque, además, sería una medida protectora para la producción arrocera española.
El etiquetado es la forma de garantizar la libre competencia al cliente que puede elegir con conocimiento que arroz quiere consumir, según Liviano.
España con una producción de arroz cascara de 826.000 toneladas, que equivalen a 490.000 t de arroz blanco, consume alrededor de 360.000 t de arroz de blanco, de las cuales 220.000 son de tipo japónica y 140.000 de tipo indica.
En cada una de las tres últimas campañas, la UE ha importado por encima de 700.000 t de arroz blanco, siendo Camboya con 235.000 t en la última campaña el origen más importante de esas importaciones, seguido de Tailandia con 156.000 t y Myanmar con 126.000 toneladas.
Cooperativas Agro-alimentarias de España valora el trabajo y el apoyo del MAPA a este cultivo y agradece a la Comisión su decisión ante la crítica situación que atraviesan los productores de arroz europeo, un cultivo que tiene una importancia crucial para la calidad del agua, la lucha contra la salinidad del suelo y la preservación de la biodiversidad.
En nuestro país existen 78 cooperativas arroceras, que representan más del 60% del arroz que se comercializa en España. Estas cooperativas están distribuidas en siete Comunidades (Aragón, Andalucía, Cataluña, Extremadura, Navarra, Murcia y Valencia), donde la producción de arroz tiene una vital importancia, tanto desde el punto de vista de la ocupación del territorio como medioambiental y ecológica.
Etiquetado de origen UE
La decisión de aplicar una cláusula de salvaguardia a las importaciones de arroz de Camboya y Myanmar y la reintroducción de aranceles por un periodo de tres años, acordada este miércoles 16 de enero por el Colegio de Comisarios envió una señal positiva a todos los productores de arroz europeos, según el COPA-Cogeca, que integra a las organizaciones agrarias y cooperativas de la UE.
Esta decisión pone fin a una situación que se había vuelto insostenible para el arroz europeo y para los productores, tras la aplicación de la Iniciativa «Todo Menos las Armas» (EBA) en 2001.
Giuseppe Ferraris, presidente del Grupo de Trabajo «Arroz» del COPA-Cogeca, agradeció a los representantes de la Comisión por el esfuerzo y el trabajo que han realizado para alcanzar este resultado positivo.
Dada la situación actual de los agricultores de arroz europeos, también era esencial que la decisión entrase en vigor lo antes posible. Al decidir aplicar nuevas tarifas a partir de enero.la CE ha demostrado comprensión con la situación crítica de los productores comunitarios».
Por su parte, Pekka Pesonen, secretario general del COPA-Cogeca, afirmo que se trata de una decisión positiva en este nuevo año, ya que el arroz está profundamente arraigado en la cultura europea y se cultiva en ocho países de la Unión, siendo un cultivo vital para prevenir el éxodo rural, además de proporcionar beneficios ambientales.
Por ello, añadió Pesonen, continuaremos defendiendo nuestras tradiciones y nuestro patrimonio, impulsando las campañas de promoción sobre el arroz comunitario y reiterando nuestra petición para lograr un etiquetado de origen del arroz a nivel de la UE.