Las organizaciones agrarias ASAJA y COAG de Andalucía demandan a la Junta regional un presupuesto adicional para atender la demanda de primera instalación al sector agrario, solicitadas en 2016, ya que en la resolución provisional se han quedado fuera un 80% de las solicitudes, afectando a un colectivo de más de 800 jóvenes, que tuvieron expediente favorable.
Las OPAs andaluzas solicitan más fondos para la primera instalación de jóvenes agricultores
Por un lado, ASAJA-Andalucía solicita el incremento del presupuesto para las ayudas a la Primera Instalación de Jóvenes en la Agricultura solicitadas en 2016. La Junta acaba de publicar la resolución provisional, en la que sólo el 20% de los expedientes de toda Andalucía está aprobado.
La organización recuerda que este tipo de ayudas europeas (incluidas en el PDRA 2014-2020) son la única herramienta que tienen los jóvenes para dejar de engrosar las listas del paro y crearse su propio puesto de trabajo en el sector primario. Así, ASAJA-Andalucía insta a la Consejería a que libere más fondos para este concepto.
La Consejería de Agricultura publicó ya los listados provisionales de expedientes aprobados, denegados y suplentes, y según los primeros cálculos, tan sólo se podrán incorporar 475 jóvenes en toda Andalucía, el 20% de todos los solicitantes.
De los 2.389 jóvenes que solicitaron la ayuda en la región, la Consejería de Agricultura había considerado como favorables los expedientes de 1.280 jóvenes, que son los que cumplían con todos los requisitos.
Sin embargo, sólo 475 jóvenes, el 36% de todos los que cumplen con los requisitos, podrán contar con la ayuda, los 805 restantes que cumplían también con los requisitos no podrán incorporarse al campo o tendrán que intentar acceder sin la ayuda de incorporación, algo francamente difícil.
Ante tal cantidad de expedientes denegados, ASAJA-Andalucía considera de vital importancia una ampliación de los fondos económicos de estas ayudas, que para la convocatoria que acaba de resolverse contaban con un presupuesto inicial de 30 M€.
Desde ASAJA-Andalucía entendemos que ante la necesidad prioritaria de relevo generacional en el sector agrario la Junta de Andalucía debe hacer un esfuerzo adicional e incrementar las ayudas, tal como hizo el pasado ejercicio, cuando tras la petición de ASAJA elevó el presupuesto hasta los 90 millones de euros.
En el presente ejercicio, para dar acceso a todos los jóvenes que cumplen los requisitos, pero que no recibirán la ayuda por falta de presupuesto, harían falta 51 M€ adicionales, de los que el 90% proceden del fondo FEADER de la Unión Europea y el 10% restante, al tratarse de una ayuda cofinanciada, lo aportaría la Junta de Andalucía.
Las ayudas a la Primera Instalación de Jóvenes en la Agricultura están incluidas en los fondos del PDRA 2014-2020 y constituyen actualmente la única herramienta con la que cuentan los jóvenes agricultores para crearse su propio puesto de trabajo en este sector tan necesitado de rejuvenecimiento y, con ello, dejar de engrosar las listas del paro.
Según esta organización agraria, el campo andaluz está sumamente envejecido. El 70% de los titulares de las explotaciones agrarias andaluzas tienen más de 50 años y el 35% sobrepasan los 65 años, y apenas el 9,4% tienen menos de 40 años. De ahí la urgente necesidad del relevo generacional en el campo por lo que desde ASAJA-Andalucía consideramos que la Junta debe multiplicar el esfuerzo en las políticas de relevo generacional.
Por último, ASAJA-Andalucía quiere recordar a todos los que pidieron las ayudas en 2016 que tienen un plazo de diez días (hasta el 27 de marzo) para completar los expedientes, tanto si han sido aprobados como si han sido denegados o han quedado suplentes. En estos dos últimos casos, pueden presentar las correspondientes alegaciones.
Aumento de presupuesto
Por su parte, COAG Andalucía pide también a la Consejería de Agricultura que incremente el presupuesto para que se produzca el necesario relevo generacional y cubrir todas las solicitudes de ayudas a los jóvenes.
Según datos de la Consejería de Agricultura, que cita COAG, de las 2.389 solicitudes presentadas en esta convocatoria, han resultado 1.280 favorables, 1.103 desfavorables y 6 desistimientos. De las 1.280 favorables, sólo 475 recibirán la ayuda (por un importe medio de unos 63.000 euros), porque los casi 30 M€ disponibles sólo permiten atender al 37% de las solicitudes favorables. Es decir, más del 60% de los jóvenes que cumplen todos los requisitos de la convocatoria quedarán sin apoyo por falta de presupuesto.
Para COAG Andalucía es inaceptable que más de 800 jóvenes que quieren incorporarse a la actividad agraria queden excluidos de la convocatoria y pide a la Consejería de haga un esfuerzo mayor para poder llegar al 100% de las solicitudes favorables y cubrir todas las solicitudes de ayudas a los jóvenes.
Es necesario volver a apostar por el relevo generacional, porque es una de las prioridades para el sector agrario andaluz, según esta organización agraria, que defiende que ningún joven que quiera incorporase de manera profesional a la actividad agraria debe quedar excluido y ha de recibir el apoyo necesario.
Por eso, “hemos solicitado en diversas ocasiones que, si el presupuesto no es suficiente para dar respuesta a todas las solicitudes, debe ampliarse la partida, ya que el relevo generacional es uno de los pilares sobre los que debe asentarse la política agraria andaluza”.
De hecho, en la convocatoria anterior (2015), la Consejería de Agricultura hizo un gran esfuerzo, aumentando de 20 a 90 millones los fondos para incorporación de jóvenes. Así, de los 1.664 expedientes favorables (de 2.921 solicitudes presentadas) se pudo atender casi al 90% (quedaron excluidos 172).
Desde COAG se insiste en que “es necesario volver a apostar por el relevo generacional, porque es una de las prioridades para el sector agrario andaluz y porque existe demanda social para dar respuesta al envejecimiento de los profesionales agrarios”.
No podemos olvidar que actualmente sólo el 4,5% de los titulares de explotaciones son menores de 35 años y el 9% son menores de 40 años. En cambio, el 36% son mayores de 65 años: esto significa que hay más de 82.000 explotaciones que en 2020 estarán en manos de mayores de 70 si no se da el relevo generacional necesario para el mantenimiento de la actividad en el medio rural.
A ello hay que añadirle el empleo indirecto: según Eurostat, por cada joven que se incorpora a la actividad agraria, se generan entre 7 y 10 empleos, lo que hace más necesario poder cubrir todas las solicitudes de ayudas a los jóvenes que cumplen los requisitos.