El Ministerio de Agricultura ha convocado el próximo martes 10 de octubre a las organizaciones del sector productor y comercializador de fruta de hueso (ASAJA, COAG, UPA, Cooperativas Agro-alimentarias, FEPEX, Afrucat), en primer lugar, y a las comunidades autónomas seguidamente, para analizar la última campaña de fruta de hueso.
El Mapama reúne el 10-O al sector y a las CC.AA. para abordar la crisis de la fruta de hueso
Esta campaña se ha caracterizado por un exceso de oferta y un fuerte descenso de los precios de venta en origen, que obligó a recurrir a las vigentes medidas de gestión de crisis, como las retiradas de producto (casi 30.000 toneladas).
El objetivo de esta reunión será crear grupos de trabajo con el sector y con las CC.AA., para analizar la campaña de comercialización de fruta de hueso o de verano de forma detallada; realizar un diagnóstico posterior sobre su desarrollo y, por último, elaborar propuestas sobre posibles medidas de carácter integral a adoptar con el fin de evitar que pueda repetirse una situación similar en las próximas campañas.
Habrá que ver, por tanto, si se está ante una crisis de tipo coyuntural, debido al exceso no gestionado de la oferta, o si es algo más profundo y estructural que exigirá de cirugía para reestructurar este sector, incluido posibles arranques de plantaciones y cambio de variedades más adaptadas al mercado, y abordar la necesidad de una gestión conjunta de la oferta de estos productos frutícolas, ahora inexistente. En este diagnóstico entraría también la fruta de pepita (manzana y pera), como señaló el Mapama en su día.
Nuestro país dedica unas 121.000 hectáreas de cultivo a la producción de frutas de hueso (melocotones, nectarinas, pavías, paraguayos, albaricoque, ciruelas y cerezas), principalmente en las CC.AA. de Cataluña, Aragón, Extremadura, Región de Murcia y Comunidad Valenciana.
A finales de agosto pasado, por ejemplo, el melocotón cotizaba de media en origen a solo 0,28 €/kg, muy por debajo del coste de producción y en valores mínimos de los últimos años, mientras que en junio el precio subía a 0,51 €/kg, en todo caso un 25% inferior al del mismo periodo de 2016.