Asaja señala la lengua azul y la aparición de nuevos serotipos como los grandes generadores de dudas en el sector
El martes 22 de octubre se celebró la reunión sectorial de Asaja para tratar los temas de actualidad que están afectando y preocupan a la ganadería de bovino y ovino en las diferentes provincias de España.
La cita, propició la participación de miembros de los equipos técnicos y de las directivas de las Asaja provinciales.
Los temas transversales de la reunión giraban en torno a las dos enfermedades principales a nivel epidemiológico que están creando mayores problemas a los ganaderos en términos de sanidad y producción animal; la lengua azul con sus múltiples serotipos y la EHE (Enfermedad hemorrágica epizoótica).
Estas enfermedades emergentes se ven favorecidas por la migración de mosquitos del género culicoides procedentes del norte de África hacia Europa, que utilizan la península Ibérica como vía de entrada para establecerse y dirigirse gradualmente hacia zonas más septentrionales.
Esta expansión se beneficia de los periodos estivales cada vez más largos y cálidos, que retrasan la llegada del ansiado periodo estacionalmente libre de estas enfermedades.
Dicho periodo comienza con la llegada del frío, factor fundamental para el descenso de la actividad de estos insectos vectores de los virus.
En el caso de la lengua azul, es la enfermedad que ha centrado gran parte del debate. La aparición de múltiples serotipos provenientes de diferentes zonas como es la vecina Portugal ha modificado bruscamente en las últimas semanas el mapa epidemiológico español. Las conclusiones de la reunión tras amplio debate y aportaciones de los asistentes pivotan en torno a una serie de propuestas de mejora para evitar el “mosaico” de colores que ha formado la irrupción de los serotipos 1 y 3, menos habituales que otros ya implantados desde hace varias campañas como el 4 y el 8 en diferentes regiones españolas.
Por toda esta situación se han tratado de obviar las consideraciones específicas de cada provincia e intentar abordar un plan estratégico común para combatir la enfermedad hasta la llegada del ansiado periodo estacionalmente libre y sobre todo de cara a la próxima campaña para estar mejor prevenidos.
La única diferencia que podría tratarse a nivel estratégico es marcar las zonas de España con un clima y un tipo de manejo del ganado distinto, esto es, zonas más al norte de la meseta con una tradición más intensiva y con veranos menos prolongados, y un sector más meridional, meseta y zona sur de España, con mayor tradición de ganadería extensiva y periodos estivales más prolongados y secos.
Propuestas y conclusiones
Estrategia a nivel nacional y no dependiendo de cada Comunidad Autónoma multiplicadas por los diferentes serotipos.
Prevención frente a la campaña de 2025. Prevención para que no suceda lo de la presente. ¿Qué hubiese pasado si el serotipo 3 hubiera aparecido a principios de verano? Probablemente una gran crisis ganadera.
Flexibilizar los requisitos del serotipo 3, viendo que la mortalidad no es elevada y que nada tiene que ver con lo que ocurre en el resto de la UE.
Más interlocución con el Ministerio en ambas direcciones.
Que el Ministerio solicite a los laboratorios que produzcan vacunas con varios serotipos, con la suficiente antelación para ejecutar una campaña de vacunación eficaz.
Unificación con resto de países, sean de la UE (Portugal) o países terceros (Marruecos), en aspectos sanitarios y comerciales.
Flexibilizar el requisito de salidas de corderos para la ayuda asociada de ovino
Ayudas directas por las muertes, las pérdidas de lucro cesante y los gastos por desinsectación, repelentes, medicamentos, etc.