Los representantes de Cooperativas Agro-alimentarias de las principales regiones productoras de frutos secos Cataluña, Castilla La Mancha, C. Valenciana, Andalucía, Baleares, Murcia y Aragón reiteraron su petición al Ministerio de Agricultura para que mantenga y mejore la ayuda nacional a los frutos de cáscara y algarrobas.
Cooperativas pide al Mapama mantener la ayuda nacional a los frutos secos
En una reunión, en la que analizaron la situación actual del sector y las consecuencias de la decisión del Ministerio de eliminar la ayuda nacional a la superficie de frutos secos, el presidente del Consejo Sectorial de Cooperativas Agro-Alimentarias, Roger Palau, lamentó esta situación, pese a la demanda unánime del sector, en la que desaparece la ayuda nacional a la superficie de frutos de cáscara, que se venía otorgando desde hace más de 10 años.
Esta decisión afectará especialmente a las plantaciones de frutos de cáscara en secano, que suponen el 84% de la superficie cultivada, añadió.
Los representantes del sector de Frutos Secos reiteraron que este cultivo, por su trascendencia medio ambiental, social y económica, debe ser considerado como estratégico en la agricultura española, destacando el papel fundamental de las cooperativas en el mismo por su papel vertebrador
Todos los representantes de las distintas zonas productoras expusieron las condiciones climatológicas adversas sufridas en los últimos meses, (fuertes heladas, lluvias y fuertes vientos), que han provocado un retraso en la campaña y que supondrán cambios en los calendarios de recolección.
El sector cooperativo propondrá al resto de organizaciones integrantes de la Mesa Nacional de Frutos Secos retrasar la publicación de los datos de previsión de cosecha hasta el mes de junio.
Durante la reunión también se analizó el balance de la pasada campaña de comercialización pasada y de la próxima que, dado el retraso vegetativo de las plantaciones, tendrá que esperar para poder realizarse una previsión más precisa sobre el desarrollo del próximo periodo comercial.
Respuesta del Mapama
Por su parte, fuentes del Ministerio de Agricultura señalaron que se decidió suprimir la ayuda en el marco de las restricciones prioritarias de este departamento y por la necesidad de abordar otras prioridades más urgentes, entre otras, las demandas de crédito en el sector de la fruta dulce.
Eso, teniendo en cuenta que la ayuda nacional a los frutos cáscara era ya muy reducida en su cuantía por superficie (menos de 10 €/ha) y que su importe no compensaba los costes de gestión.
El Mapama apunta, además, que la coyuntura de precios en este sector ha sido positiva en los últimos años y que, en todo caso, se mantiene no obstante la ayuda comunitaria acoplada de la PAC, financiada por el FEAGA, de unos 14 millones de euros al año.