Según informó la Red de Alerta Sanitaria y Veterinaria (RASVE) del Ministerio de Agricultura, se han detectado cuatro aves silvestres, que se encontraron muertas, y que resultaron ser positivas a la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) H5N8, en el Parque Natural dels Aiguamolls de l’Empordà, provincia de Girona.
Detectadas cuatro aves silvestres muertas con «gripe aviar» altamente contagiosa en Girona
No obstante, el MAPA recalca que el hallazgo del virus en aves silvestres no implica restricciones al movimiento de aves domésticas, ni de sus productos, añadiendo que se trata de una cepa no zoonósica, por lo que no afecta al ser humano, no pudiendo transmitirse ni por el consumo de carne de ave ni de huevos.
Aún así, se insiste desde este Departamento de que «es necesario extremar las medidas de bioseguridad para evitar la transmisión a aves domésticas y mantener la vigilancia constante comunicando cualquier sospecha de enfermedad.»
Más en concreto, el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) confirmó la detección del virus de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) H5N8 en 3 cigüeñas (Ciconia ciconia) y una oca (Anser anser), localizadas muertas por los Agentes Rurales en el Parque Natural dels Aiguamolls de l’Empordà los pasados 5 y 11 de enero.
Las aves se localizaron gracias al refuerzo del componente de vigilancia pasiva que forma parte del Programa Nacional de Vigilancia de la Influenza Aviar en España, como consecuencia del aumento de riesgo ante la reciente evolución de la situación epidemiológica del virus en la zona de las Landas, en Francia, así como en gran parte del centro y norte de Europa.
En el Parque Natural de Aiguamolls de l’Empordà también se detectó una cigüeña positiva frente al mismo virus en enero de 2017.
El hallazgo del virus en aves silvestres, señala el MAPA, no implica modificaciones en el estatus sanitario con respecto a la Influenza aviar ,manteniéndose el estatus de libre en todo el territorio español y no supone restricciones al movimiento de aves domésticas ni de sus productos.
No obstante, las autoridades veterinarias de la Generalitat van a reforzar la vigilancia y control en la zona comprobando la correcta aplicación de las medidas de bioseguridad en las explotaciones.
La detección de estos casos no implica un riesgo para la salud pública, ya que los estudios genéticos basados en el análisis de las secuencias de virus completo muestran que se trata de un virus aviar sin afinidad específica por los seres humanos.
Además, este virus no puede ser transmitido al hombre a través de carne de ave cocinada, huevos o productos procesados derivados de ellos.
El MAPA afirma también que ha estado informado regularmente de la evolución de esta situación epidemiológica a través de videoconferencias, notas enviadas por correo electrónico y noticias hechas públicas en la página Web, a los Servicios Veterinarios de Sanidad Animal de las Comunidades Autónomas, a los sectores productores relacionados con la avicultura, a los Servicios y Sectores de Medio Natural y Caza, y al Ministerio de Sanidad.
Reforzar las medidas
Esta misma semana se publicó en el BOE la Orden APA/19/2021, de 18 de enero, por la que se modifica la Orden APA/2442/2006, de 27 de julio, que establece medidas específicas de protección en relación con la influenza aviar, que refuerza la bioseguridad no sólo en las zonas de especial riesgo del anexo II de la Orden APA/2442/2006, de 27 de julio, sino también en las zonas de especial vigilancia establecidas en el anexo III de la mencionada orden.
Asimismo, incorpora la posibilidad de aplicar medidas más restrictivas en el ámbito autonómico, si así lo determina la autoridad competente en base a análisis de riesgo realizados a este nivel. La modificación de la Orden también contempla modificaciones de los anexos I, II y III, con objeto de actualizar los humedales y territorios incluidos en las zonas de especial riesgo y de especial vigilancia
Desde el MAPA se insiste en la necesidad de reforzar las medidas de bioseguridad en las explotaciones avícolas, especialmente aquellas medidas destinadas a evitar el contacto con aves silvestres, así como reforzar la vigilancia pasiva tanto en explotaciones avícolas como en aves silvestres, notificando a los servicios veterinarios oficiales cualquier sospecha de enfermedad.
Archivo adjunto: catalunaia22_01_2021final_tcm30-555399