El MAPA estima que en 2023/24 se importaron 24 Mt de cereales, más del doble que la cosecha de campaña
La Dirección General de Producciones y Mercados del Ministerio de Agricultura realizó un balance de mercado estimativo de sector de cereales de nuestro país de la campaña 2023/24, que concluyó el pasado 30 de junio, en el que destacan entre otros, por un lado, unas importaciones de 24 millones de toneladas de los distintos cereales y, por otro, una producción de apenas 11,65 millones.
En cuanto a las importaciones estimadas de cereales, éstas representarían más del doble de la floja producción de la cosecha de la campaña anterior, habiéndose adquirido en cifras redondas unos 10,5 Mt de maíz grano; 9 Mt de trigo blando, 3,25 Mt de cebada, así como cantidades mucho más bajas de trigo duro (400.000 t); centeno (250.000 t); avena (280.000 t), triticale (260.000 t) y sorgo (60.000 t).
En cuanto a la producción históricamente baja, debido a la fuerte sequía padecida en los meses previos a la cosecha de la pasada campaña, casi 3,8 Mt fueron de cebada; casi 3,55 Mt de trigo blando; otros 2,91 Mt de maíz grano; 460.100 t de avena; 431.800 t de trigo duro; 354.700 t de triticale; 120.300 t de centeno y 29.300 t de sorgo.
La superficie sembrada alcanzó casi los 5,35 millones de hectáreas, con un rendimiento medio del conjunto de cereales de apenas 2.200 kg/ha, gracias principalmente al maíz de regadío (12.000 kg/ha) y en menor medida el sorgo (3.000 kg/ha), puesto que el resto de los cereales de otoño-invierno registraron rendimientos medios a nivel inferiores, con el trigo blando (media de 2.100 kg/ha), trigo duro (1.600 kg/ha); cebada (1.600 kg/ha), centeno (1.400 kg/ha), avena (1.000 kg/ha), y triticale (1.400 kg/ha).
La campaña 2023/24 se inició el 1 de julio de 2023 con un stock de casi 4,36 millones de toneladas, de las cuales 1,43 Mt eran de maíz; 1,4 Mt de trigo blando; casi 1,3 Mt de cebada; 103.000 t de trigo duro; 47.300 t de avena; 37.800 t de triticale; 22.300 t de centeno y 18.700 t de sorgo.
La oferta total disponible de cereales fue de 40 Mt, con 27 millones para alimentación animal
La oferta total disponible en la campaña pasada fue de 40 millones de toneladas, destinándose al consumo interno casi 36,5 Mt, de las cuales 27 millones fueron a la fabricación de piensos para la alimentación animal; algo más de 5 millones a alimentación humana; casi 3,31 millones a usos industriales, de los cuales 1,2 millones a la fabricación de bioetanol; otras 995.000 t se destinaron a su uso como semillas y 120.000 t se contabilizaron como pérdidas por diferentes motivos (transporte, trasvases, cosecha, etc.).
A pesar de la muy baja cosecha nacional de grano, nuestro país se estima que exportó 810.000 toneladas, de las cuales 230.000 t habrían correspondido a maíz grano; 225.000 t a trigo duro; 200.000 t a cebada; 120.000 t a trigo blando; 20.000 t a avena; 10.000 t a centeno; 3.000 t a sorgo y 2.000 t a triticale.
El total de las utilizaciones (consumo interno más exportaciones) de cereales en nuestro país se estima en casi 37, 31 millones de toneladas, resultando al final un stock a 30 de junio de apenas 2,7 millones, un 38,1% y 1,66 Mt menos que al inicio de 2023/24, correspondiendo casi 1,16 millones a maíz grano; 800.000 t a trigo blando, 598.600 t a cebada; 65.500 t a trigo duro; 27.700 t a triticale; 27.100 t a centeno; 14.200 t a sorgo, y 4.800 t a avena.
Archivo adjunto: balancescerealeses_2023_24jun24_
