El ministro de Agricultura promete simplificación burocrática, ajustes técnicos de la PAC y adaptaciones a los seguros agrarios
El ministro de Agricultura, Luis Planas, se ha reunido este viernes con varias organizaciones profesionales agrarias y ha reiterado el compromiso del Gobierno con el sector. “El Gobierno y este ministro están dispuestos a seguir trabajando, con las organizaciones agrarias y el conjunto del sector, para avanzar hacia el futuro”, ha recalcado el ministro.
Luis Planas ha expresado así el compromiso firme con el sector tras la reunión con Asaja, COAG y UPA, que pidieron por carta este martes, 30 de enero, un encuentro con el ministro. “El Gobierno entiende sus preocupaciones y estamos con ellos”, ha asegurado.
En referencia a las protestas agrarias de Europa, ha señalado, que la situación con España es diferente y ha mencionado, por ejemplo, que «el Gobierno va a mantener la devolución del impuesto especial de hidrocarburos al gasóleo agrícola -punto de fricción en otros países- y ha destacado que la reforma de la ley de la cadena alimentaria, que emprendió este Gobierno, recogió una de las demandas históricas del sector agrario: prohibir la venta a pérdidas».
Las demandas, punto por punto
En relación con la simplificación de los trámites burocráticos, el Gobierno va a trabajar junto a las comunidades para identificar qué elementos es posible reducir en esa carga administrativa.“Simplificar no significa dejar de cumplir, pero si hacerlo de manera más sencilla”.
Planas ha subrayado la importancia que tienen los acuerdos comerciales con terceros países para el sector agrario español. De hecho, en el año 2000 la balanza comercial agroalimentaria era negativa y hoy arroja un saldo positivo de casi 14.900 millones de euros, con unas exportaciones que superan los 70.000 millones. No obstante, ha indicado que para mantener este “éxito comercial”, es necesario mantener un seguimiento estricto de las importaciones y comprobar el cumplimiento de los contingentes arancelarios.
El ministro ha asegurado que su departamento es sensible a los problemas que la aplicación de la Política Agraria Común (PAC) pueda tener en determinados territorios para buscar soluciones. Así, en el proceso de modificación del Plan Estratégico de la PAC tras su primer año de aplicación, el ministerio llevará a cabo los ajustes técnicos necesarios. Además, en los relativo al relevo generacional ha apuntado que la nueva PAC incluye más presupuesto para favorecer la incorporación de jóvenes, con unos 220 millones de euros al año.
También ha ofrecido la disposición del ministerio para trabajar con las comunidades autónomas en la aplicación efectiva de la ley de la cadena alimentaria, una norma que “tenemos que aplicar mejor”. En esta línea, ha señalado que se han reforzado los medios humanos y técnicos de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA).
Asimismo, el ministro ha pedido que se deje fuera del debate partidario y sectario los temas de sanidad animal y vegetal. “Los ganaderos españoles están haciendo un esfuerzo formidable para cumplir los estándares europeos y ser los más avanzados en términos de estatus sanitario de la cabaña ganadera, y ese esfuerzo no lo podemos echar atrás”, ha subrayado. En el caso concreto de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica, el ministro ha pedido un esfuerzo de coordinación para avanzar en la erradicación de esta enfermedad.
En referencia a los seguros agrarios, Luis Planas ha señalado que el ministerio y las organizaciones agrarias están analizando, línea por línea, las adaptaciones necesarias, en el actual contexto de cambio climático.
Las Organizaciones Agrarias mantienen las movilizaciones tras las reunión
A pesar de estos anuncios, tras el encuentro con el ministro, las organizaciones agrarias han anunciado que mantienen el calendario de movilizaciones previsto la pasada semana y que se desarrollarán inicialmente en las comunidades autónomas.
Han apuntado que sigue «la unidad de acción entre todas las organizaciones agrarias», que se anunció el miércoles pasado, un «acuerdo común» de establecer movilizaciones por la crisis del campo en las «próximas semanas».
