Tras la reunión el miércoles 28 de abril con la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, las organizaciones agrarias, ASAJA, COAG y UPA reiteraron su rechazo a dejar de controlar el lobo y, en este sentido, mantienen el proceso de movilizaciones, principalmente ante la negativa de la vicepresidenta cuarta del Gobierno a “dar marcha atrás” en esta decisión.
Las OPAs mantienen las protestas ante la negativa de Ribera de “dar marcha atrás” en la inclusión del lobo en el LESPRE
Estas tres OPAs de ámbito estatal recuerdan que son 11 las CC.AA. que se han mostrado también contrarias a la decisión de la ministra de incluir al lobo ibérico en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre).
No obstante, estas organizaciones valoran la apertura de un nuevo marco de diálogo del Miterd con el sector agrario, pero advierten que debe servir para negociar, desde cero y con todos los actores implicados, un plan global de gestión y control del lobo que garantice la coexistencia con la ganadería extensiva.
Este proceso, según las OPAS, debería recoger un análisis actualizado del número real de manadas y de ejemplares que existen en España, así como las posibles medidas para facilitar la coexistencia con la ganadería, el control poblacional y las compensaciones frente a los daños.
Actualmente, añaden, el lobo ibérico es una especie en expansión en España. Su número no ha dejado de crecer en las últimas cuatro décadas y sus poblaciones en el Noroeste peninsular son las de mayor densidad de toda Europa occidental.
Esta abundancia, señalan, unido a la presencia de explotaciones de ganado extensivo en las zonas rurales, está generando un conflicto, que se ve agravado con medidas como las que pretende adoptar el Ministerio.
Por tanto, afirman estas tres organizaciones agrarias, “los ganaderos/as, no entendemos que el Canis lupus precise una protección especial, como no lo hace en los países de nuestro entorno, donde las medidas de control son más rigurosas.
Por último, recuerdan que la ganadería extensiva ha constituido tradicionalmente una actividad esencial para el mantenimiento del medio ambiente y, de forma especial, en las áreas de montaña. Generadora de empleos y economía, la ganadería extensiva y el mantenimiento de las razas autóctonas han resultado fundamentales en la gestión de los recursos y en la ordenación del territorio, habiendo contribuido de forma determinante a la conformación del legado natural y la biodiversidad.
Sostenibilidad y reto demográfico
Por otro lado, la vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera afirmó que se acordó entablar de manera periódica un diálogo estable, con el fin de abordar los retos y las oportunidades en materia de sostenibilidad y de reto demográfico.
Durante el encuentro con los representantes de ASAJA, COAG y UPA, se repasaron algunas de las cuestiones de interés para los sectores agrícola y ganadero, en los que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miterd) tiene competencia.
Así, por ejemplo, se abordaron los principios en los que se inspira la planificación hidrológica de tercer ciclo, que este departamento está ultimando para sacar a información pública en breves.
También, en un momento en el que España está preparada para afrontar el despliegue de las energías renovables, que nos permitan avanzar hacia la plena descarbonización de nuestra economía en 2050, en un objetivo compartido con la Unión Europea, se pusieron sobre la mesa las alternativas energéticas, que permitan al sector agrario mantener su productividad y su actividad en el territorio, contribuyendo, igualmente, a la transición ecológica. Al respecto, se abordó la compatibilidad de las nuevas fuentes energéticas con los usos agrarios.
Biodiversidad
En el transcurso de este encuentro, Teresa Ribera reiteró su apoyo expreso a la agricultura y a la ganadería extensiva, como una práctica preferente y compatible con la conservación de la biodiversidad en el medio rural, y su contribución a la modernización de los sectores tradicionales y para fijar población en el territorio.
En este sentido, la vicepresidenta cuarta del Gobierno animó a las OPAs a que tomen parte activa en el proceso de elaboración de la nueva Estrategia de Gestión del Lobo Ibérico.
Desde este punto de partida, Ribera recordó que el nuevo modelo de gestión del lobo no debe representar un problema, sino afianzar la convivencia de esta especie silvestre emblemática con las actividades agropecuarias.
Dicha Estrategia debe también contribuir a mejorar la atención a los daños causados por la depredación, que puedan registrarse en las zonas donde coexistan la ganadería y el lobo ibérico, así como sobre la necesidad de dar una respuesta homogénea en aquellos territorios con mayor presencia de esta especie.