Según los datos, aún muy provisionales, de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), las salidas al mercado de aceite de oliva durante el pasado mes de junio se habrían ralentizado respecto al mes anterior, quedando en poco más de 100.000 toneladas, unas 21.000 t menos.
Las salidas de aceite de oliva al mercado superaron las 100.000 t en junio
Del volumen total, que deberá tener una primera confirmación a finales del presente mes, se estima que unas 70.000 t corresponderían a exportación y en torno a 31.000 t a atender la demanda interna, mientras que las importaciones se prevén que alcancen en torno a 4.000 toneladas.
Las existencias totales a finales de junio quedarían, de acuerdo a estas cifras provisionales, en unas 592.850 toneladas, cuando solo quedan por contabilizar un trimestre de la actual campaña 2016/17. En almazaras quedarían a 30 de junio unas 387.500 toneladas, unas 81.600 t menos que en el mes anterior y 95.000 t por debajo de las de finales de junio de 2016. En poder de los envasadores y otros operadores del mercado habría unas 185.000 t, unas 11.000 t menos que a finales de mayo, pero casi 15.000 t más que en esa fecha de 2016. Y en los depósitos del Patrimonio Comunal Olivarero habría 19.700 t, alrededor de 4.000 t que un mes antes.
Con los datos muy provisionales de junio, la campaña 2016/17, en la que se ha producido un total de 1.282.000 t (-8,6% sobre 2015/16) de aceite de oliva, podría cerrarse el próximo 30 de septiembre con unas disponibilidades totales de 1.698.000 t,de las cuales 331.000 t serían stock inicial, más la producción de campaña y más unas 85.000 t (-27,8%) de aceite de oliva importado, con una media de alrededor de 5.000 t por mes.
La media de salida de aceite de oliva al mercado quedaría en unas 120.000 t por mes, de las cuales alrededor de 80.000 t serían a la exportación y 40.000 t para atender la demanda interior. Son cifras algo más bajas que en los meses anteriores que, de confirmarse, darían lugar a unas salidas totales en la campaña 2016/17 de 1,46 Mt (+6,5% sobre 2015/16), de las que 490.000 t (-2,5%) atenderían la demanda interna y 970.000 t (+11,7%) irían al mercado exterior.
Por tanto, se volvería a bajar de las 500.000 t de aceite de oliva de demanda interna, debido a los precios bastante elevados que se han producido tanto en origen, como en los PVP consumidor, que han llevado a la búsqueda de alternativas en grasas vegetales más baratas, sobre todo de aceite de girasol., mientras que las exportaciones se quedarían por debajo del millón de toneladas que esperaba poder vender fuera el sector hace unos meses.
Así, las cosas, el stock final para enlace de campaña (hasta al menos la salida de aceite de oliva de nueva cosecha en noviembre) se quedaría, tras ver el avance de datos de junio, en torno a las 238.000 toneladas. Una oferta suficiente para que no haya problemas de abastecimiento en este par de meses entre campañas.
Se lograría, además, un nuevo récord de facturación en origen de aceite de oliva, aunque parece ahora mismo que pueda llegarse a los 5.000 millones de euros. Las últimas estimaciones, con los precios medios barajados superarían, no obstante, los 4.900 millones.
Sin embargo, tampoco es descartable que en esos meses que quedan de campaña la comercialización de aceite de oliva repunte y puedan mejorarse aún los registros actuales. Dependerá también de cómo venga la meteorología en esta segunda parte del verano y de la evolución del estado de los olivos, d e cara a la producción de aceituna de la próxima campaña que, según los primeros comentarios, podría ser bastante inferior a la de la presente.