El Ministerio de Agricultura quiere dotar de más transparencia, sobre todo en el sector de leche de vaca, y evitar las situaciones de impago a los poco más de 14.500 productores ganaderos de parte de los más de 300 primeros compradores, principalmente no transformadores, que declaran entregas a industria.
El Mapama quiere más transparencia y evitar impagos en los primeros compradores de leche
Para ello incluirá cambios legislativos en el próximo Real Decreto por el que se establecen las condiciones de contratación en el sector lácteo y se regula el reconocimiento de las organizaciones de productores y de las organizaciones interprofesionales en el sector, recogidas en el RD 1363/2012, de 28 de septiembre y en el RD 125/2014, de 27 de febrero que a su vez lo modifica. Es decir, en el denominado “Paquete Lácteo”.
Más en concreto, en el caso de los primeros compradores de leche, lo que se pretende modificar es el RD 319/2015, de 24 de abril, con el objetivo de establecer una declaración obligatoria complementaria a efectuar por este colectivo y la exigencia a determinados compradores (principalmente a los que no tienen también la condición de transformadores) de una garantía financiera para asegurar el cumplimiento de las obligaciones de pago a los ganaderos por la leche entregada.
Precisamente, las organizaciones agrarias han venido siendo muy críticas con el colectivo de primeros compradores no transformadores, que solo se dedican a intermediar la compraventa de leche de vaca para su posterior venta a la industria transformadora.
Aunque es cierto que garantizan la recogida y suministro a la industria de la leche de los ganaderos, muchas veces se han dedicado a especular con la materia prima y a realizar el “papel sucio” a favor de la industria transformadora, que siempre se ha beneficiado de esta intermediación, y en contra de los intereses económicos de los productores, que han sido a menudo perjudicados por el abandono de rutas y por la constante presión sobre la recogida de volúmenes, fijación de precios y primas o descuentos sobre las calidades del suministro de leche.
Por lo demás, el Mapama pretende con esta nueva modificación normativa incorporar a la legislación nacional los cambios y las mejoras aprobados a nivel comunitario en el denominado “Paquete lácteo”, cuya vigencia se quiere extender más allá de 2020, de acuerdo a la recomendación general y a las recomendaciones específicas de los dos informes de la Comisión Europea sobre el funcionamiento del citado paquete, el informe del Parlamento Europeo al primer informe de la Comisión del Paquete Lácteo, así como las conclusiones del Grupo de Trabajo “Agricultura Markets Task Force”.
Asimismo, el Mapama quiere aprovechar la experiencia acumulada en la aplicación de la normativa nacional sobre el “Paquete Lácteo” para incorporar ciertos mecanismos de flexibilidad y de adaptación a las distintas situaciones que puedan presentarse para la mejora del equilibrio de la cadena de valor del sector lácteo y para reforzar la posición negociadora de los productores.