Miles de manifestantes reclaman a Ribera no recortar los recursos hídricos del trasvase Tajo-Segura
Unos 11.000 manifestantes, según los organizadores (7.000 según la Delegación del Gobierno) han reclamado su acceso al agua del trasvase Tajo-Segura frente al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miterd), que preside la ministra y vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera.
Varios miles de agricultores y regantes de Alicante, Murcia y Almería llegaron a Madrid para demandar que no se recorten los recursos hídricos a esta zona del Sureste Peninsular, que es también una de las más áridas de España y de Europa.
La protesta fue convocada por la plataforma «Círculo por el Agua «y por el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats) y concentró en una manifestación multitudinaria a organizaciones y asociaciones agrarias, a miembros de la Federación de Productores y Exportadores hortofrutícolas (FEPEX), a empresarios, regantes, cooperativas, colegios profesionales y Universidades de estas zonas agrícolas.
En algunas de las pancartas se podían leer mensajes como «En el Levante sin agua, desierto y paro», «Levante sin agua muere», «Más desalación, igual a menos sumideros de CO2″ o «Si recortan el trasvase, recortan el futuro de Alicante, Murcia y Almería», entre otros.
Los manifestantes consideraron «conveniente» llevar agua a esa zona no solo por el bien de su agricultura, su turismo y su medioambiente, sino también por el bien del país.
«A la Cuenca del Segura no se le puede restar un solo metro cúbico de agua. Hay que sumarle recursos, no restarle, y menos aún por contiendas políticas territoriales», aseguraron las organizaciones convocantes en un manifiesto.
En su escrito pidieron a Ribera que reconsidere su «decisión sectaria y radical de recortar innecesariamente el trasvase», después de que su equipo técnico dejara entrever en un borrador de proyecto de real decreto que es posible no elevar caudales actuando en el Alto Tajo e invirtiendo en modernización de regadíos y depuración.
En su lugar, los manifestantes exigieron inversiones «en acciones reales para el río Tajo, que mejoren la calidad de las aguas y la vida de los ciudadanos que viven en sus laderas», sin «dejarse llevar por ideas preconcebidas» que aumenten la brecha del déficit hídrico en la Cuenca del Segura.
Además, advirtieron de las consecuencias de poner en riesgo el trabajo de decenas de miles de agricultores del levante, colocando «al borde del colapso a las economías de sus regiones», e insistieron en que el agua «no es una batalla política entre Comunidades Autónomas, sino un asunto de Estado y un derecho igualitario para todos los españoles».
Los regantes piden a Ribera que abandone su actitud radical y política en la planificación hidrológica
Según la agencia EFEAgro, el presidente de Scrats, Lucas Jiménez, quien recalcó que no iba a ser recibido por responsables del Miterd tras la protesta, pidió a la titular de este departamento, Teresa Ribera, que abandone su «actitud radical» y su «planificación hidrológica», que ha tachado de «totalmente política».
Asimismo, el director de FEPEX, José María Pozancos, señaló que, si se recorta la disponibilidad de agua en el arco mediterráneo, «el volumen de frutas y hortalizas producidas en España se reducirá y los ciudadanos no podrán acceder a una dieta saludable asequible».
Por su parte, el presidente de la Federación hortofrutícola murciana, Proexport, Mariano Zapata, afirmó que sus asociados han venido a Madrid «a pedir respeto y dignidad para el campo», tras insistir en que «reducir el agua trasvasada supone la amenaza de acabar con más de 15.000 empleos y miles de hectáreas de regadío».
«Y todo ello sin un aval científico, solamente atendiendo a razones políticas», añadió, expresando también su deseo de que la ministra Ribera «recapacite y nos permita seguir trabajando para producir las mejores frutas y hortalizas del mundo».
Los manifestantes expresaron su temor a que el Levante se convierta en un desierto
Entre los manifestantes hubo un mensaje y un temor compartido: que el Levante se convierta en un desierto. Así, en declaraciones a EFEAgro, Catalina Hernández, con un chaleco de los Regantes del Campo de Cartagena, explicó que no quiere que Pozo Estrecho «se convierta en un desierto como este verano, cuando por falta de agua no se pudo plantar», al ser de las primeras zonas con restricciones de suministro.
A su vez, José María Navarro, agricultor de Albatera (Alicante), portó una bandera en la que pone «Nos estáis ahogando y no con agua», afirmando que ahora pagan el recurso hídrico «carísimo», a unos 60 euros la hora de riego y que si siguen adelante los planes de Transición su precio será «inasumible, en torno a los 250 euros la hora».
También, el camionero Juan Antonio Chuecos comentó que «sus viajes a Europa, con cargamentos de verduras desde el Levante, ya se han visto reducidos en los últimos meses», por lo que teme que, si sigue adelante la política de menos trasvases, «peligre su trabajo y el de toda la actividad agrícola».
Para Abuy Sey, senegalés que trabaja en Totana (Murcia), en la empresa Hortalizas La Serrana, ahora tienen menos trabajo que cuando llegó hace un año; Vladimir Pérez, de Mimaflor (Pulpí, Almería) reconoció también su temor, porque «si falta agua, habrá menos trabajo y tendrán que recortar la plantilla».
Francisco Collado, de Antas (Almería), fue tajante al asegurar que «no quiere que su hijo tenga que emigrar, como tuvieron que hacer su padre y sus tíos», cuando la provincia era un «desierto».»Llevo 40 años sin parar de trabajar en mis invernaderos y hemos llegado a ser la despensa de hortalizas de Europa, si Ribera no sabe gobernar, que se vaya», apuntó.
En la manifestación se dieron cita también políticos como varios senadores y diputados del Grupo Popular de la provincias del Levante; el presidente de Murcia (PP), Fernando López Miras; las consejeras del área de la Comunidad Valenciana y Andalucía, Isaura Navarro y Carmen Crespo, así como alcaldes de poblaciones agrícolas afectadas por la reducción del volumen del trasvase como Lorca o Murcia.