El ministro de Agricultura, Luis Planas anunció que, dentro de una semana, el próximo lunes día 29 de noviembre mantendrá una reunión con todos las organizaciones profesionales agrarias, cooperativas agroalimentarias, pero también con los demás componentes de la cadena alimentaria, industria y distribución para comentar, por un lado, la aprobación de la Ley de la Cadena Alimentaria y, a su vez, “discutir y conversar sobre la actual situación de incertidumbre del mercado, analizar los problemas y ver las soluciones”.
Planas convoca el 29-N a las OPAs y al resto de la cadena agroalimentaria para abordar la actual situación de incertidumbre
En concreto, el ministro hizo referencia a la actual coyuntura del sector agrario, al señalar que “entiendo que hay incertidumbre y preocupación”, reiterando la apuesta por el diálogo como método de trabajo idóneo “para resolver dudas y buscar soluciones”.
Por otro lado, Luis Planas aseguró que el Gobierno está plenamente comprometido con el cumplimiento de la Ley de la Cadena Agroalimentaria, cuya reforma, a punto de culminar en su tramitación parlamentaria, ha venido siendo una demanda del sector y va a ser “una gran oportunidad para reequilibrar” el reparto de valor de una forma más justa entre los distintos eslabones.
El ministro de Agricultura participó el foro “El reto de transformar el sector agroalimentario”, que forma parte del ciclo “Fondos Europeos, las claves para la recuperación”, organizado por la agencia EFE y la consultora KPMG, donde reiteró que el sector primario juega un papel estratégico y central en la economía española.
El ministro aseguró la reforma de la Ley de la Cadena ha sido una prioridad para el Gobierno, porque da respuesta a una demanda del sector y porque tiene como objetivo propiciar una cadena alimentaria equilibrada y justa.
La nueva norma, añadió Planas, mejorará la capacidad de negociación del eslabón más débil, que son agricultores y ganaderos, y les permitirá obtener una remuneración digna por sus productos, y recalcó el compromiso firme del Gobierno en su aplicación “con todos los participantes en la cadena”.
Asimismo, destacó que “es una gran oportunidad para reequilibrar la cadena y para que todos los eslabones participen en la generación de valor, para caminar hacia adelante teniendo un rumbo”.
Se prevé que la reforma de la ley, que superó el pasado 17 de noviembre su trámite en el Senado, sea aprobada definitivamente por el Congreso la semana próxima.
Se trata de la segunda fase de la reforma de esta ley. La primera se realizó mediante decreto-ley en febrero de 2020, cuando se introdujo la obligatoriedad de que los precios de venta de un producto sean como mínimo iguales a lo que cuesta producirlos y de que las operaciones queden reflejadas en contratos por escrito.
Algo que el ministro consideró como un gran avance, aunque desde las organizaciones agrarias se reitera que no se está cumpliendo en los contratos escritos de compraventa que realizan los agricultores y ganaderos, sobre todo en el sector lácteo, que es el sector pionero de la relación contractual bajo la normativa de la Ley de la Cadena Agroalimentaria.
En esta segunda fase de la reforma, añade el MAPA, se ha incorporado la Directiva del Parlamento Europeo sobre prácticas comerciales desleales en la cadena de suministro de alimentos, al objeto de amparar a los agricultores y ganaderos españoles en sus relaciones con operadores nacionales, europeos y de terceros países. Se trata de un cambio en las reglas de juego muy importante, incidió el ministro.
Sistema alimentario más justo y sostenible
Planas destacó como uno de los más importantes desafíos que tiene planteado el sector avanzar hacia la sostenibilidad, para conseguir un sistema alimentario más justo y sostenible. La sostenibilidad debe tener una triple dimensión, ambiental, social y económica, «porque si no hay rentabilidad, no podrá haber tampoco transición ecológica».
Para afrontar estos retos y asegurar la competitividad y rentabilidad del sector agroalimentario es preciso, según explicó Planas, la transformación digital, con una apuesta por la innovación, la formación y la transferencia de conocimiento.
El ministro destacó también que el sector agroalimentario, que fue central en la resistencia contra la pandemia de Covid-19, garantizando el suministro de alimentos y manteniendo sus índices de exportaciones, lo es también ahora en la etapa de recuperación económica.
Además destacó que el sector tiene ante sí una excelente oportunidad para afrontar los retos que tiene planteados por la confluencia de varios instrumentos de apoyo que rara vez se da en la historia.
Así, Planas volvió a mencionar la nueva Política Agraria Común (PAC), con unos fondos de 47.724 M€ para el periodo 2023-27; el PRTR, que en el componente para el sector primario que gestiona el MAPA dispone de un presupuesto de 1.051 M€, y el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) Agroalimentario, cuya memoria se aprobará a finales de este año o principios del próximo.
El ministro recordó también otras medidas de apoyo, puestas en marcha por el Gobierno, como mantener la devolución del impuesto del gasóleo agrícola, combustible que, además, está bonificado, o el mantenimiento del sistema de módulos del IRPF para el sector agrario. En este punto, Planas recordó que en 2020 se aplicó la mayor reducción fiscal para el campo español de los últimos años, con una rebaja de la base imponible de 1.051 millones de euros.