El ministro de Agricultura, Luis Planas, se reunió este jueves 18 de marzo con los responsables de las organizaciones profesionales agrarias, ASAJA, COAG y UPA, para abordar el estado de situación de las negociaciones para la reforma de la Política Agraria Común (PAC) 2023-2027.
Planas hará un «esfuerzo extra de diálogo» para negociar el proceso de convergencia de las ayudas PAC de 2022
Una primera reunión, según explicó, con la que inicia una ronda que le llevará también a reunirse a continuación con cada una de las CC.AA. a lo largo del mes de abril, con el objetivo de sumar y conseguir un gran acuerdo nacional para definir cómo se distribuyen las ayudas y cómo se hará la convergencia (equiparación de ayudas entre beneficiarios) del valor de los derechos de pago básico de la PAC.
Con respecto a esta última, Planas indicó que el Ministerio “está dispuesto a hacer un esfuerzo extraordinario de diálogo para poner sobre la mesa el proceso de convergencia del año 2022”, en el marco de la negociación global de la futura PAC, remarcando, no obstante, que ese proceso de ajuste hacia arriba y hacia debajo del valor de los pagos debe ser gradual, pero continúo y, además, tener una fecha de finalización.
Por otro lado, España apoya a la Presidencia semestral portuguesa del Consejo de la Unión Europea en su intención de cerrar el acuerdo sobre los tres reglamentos de la nueva PAC en este primer semestre de 2021, con el fin de avanzar con certidumbre en la elaboración del Plan Estratégico nacional (PEPAC). Y, para ello, está prevista la celebración de un “supertrílogo” el próximo 26 de marzo, del que se esperan lograr importantes avances.
De cara al próximo Consejo de Ministros de Agricultura de la UE del 22 y 23 de marzo, nuestro país participará activamente en el debate de los dos “paquetes de compromiso”, que presentará la Presidencia, sobre los bloques de pagos directos y Nuevo Modelo de Aplicación (“New Delivery Model”), con la intención de que se puedan cerrar posteriormente en el citado supertrílogo.
Según explicó Planas, el cierre de estos temas permitirá pasar a los siguientes bloques, principalmente el de la denominada “arquitectura verde” y el de “otro tipo de intervenciones”.
En relación con el Nuevo Modelo de Aplicación, el ministro explicó a las organizaciones agrarias que España defiende que se mantenga el mandato del Consejo de buscar la máxima simplificación y flexibilidad, así como que la evaluación del rendimiento –es decir, de los resultados- sea homogénea para todos los Estados.
En cualquier caso, Planas entiende que la necesidad de evaluar el rendimiento en el nuevo modelo no puede suponer un aumento de la carga administrativa, es decir, “que no se haga más compleja la PAC”, afirmó.
Planas apuntó, asimismo, que todavía siguen en discusión cuestiones como la figura del “agricultor genuino”, la convergencia interna, el régimen de pequeños agricultores, el pago redistributivo o el apoyo a los jóvenes, entre otras.
Sobre ellas, España también defiende la necesaria flexibilidad para que cada Estado pueda determinar la política más adecuada a su situación, siempre bajo el principio de subsidiariedad.
Por otra parte, Planas aseguró a las organizaciones agrarias que el MAPA tiene muy en cuenta al sector del tabaco crudo, al igual que otros sectores con problemáticas específicas, en los trabajos de análisis de diagnóstico y de elaboración del Plan Estratégico de la PAC, dada su importancia y social y económica para las zonas donde se cultiva.
Por ello, España presentará una propuesta de futura PAC en la que estos sectores tengan el mejor encaje posible.
Por último, el ministro volvió a recordar que España solicitará en el próximo Consejo de Ministros medidas excepcionales para el sector del vino, debido a la crisis que atraviesa como consecuencia de la pandemia, y que son ya 13 los Estados miembros que apoyan esta iniciativa.