Ganaderos de vacuno, veterinarios, investigadores, representantes de la administración y otros actores del sector se han reunido en Caixa Fórum de Madrid para, de la mano de Asoprovac, la asociación más representativa de vacuno de carne, presentar los primeros resultados del proyecto Life Beef Carbon, destinado a reducir la huella de carbono de la carne de vacuno un 15% en los próximos 10 años y que se está llevando a cabo en Francia, Irlanda, Italia y España.
Asoprovac presenta los primeros resultados del proyecto Life Beef Carbon
El cambio climático, los acuerdos internacionales, la PAC y la ganadería, han sido los conceptos clave y pilares que se han tenido en cuenta en esta conferencia con el objetivo de garantizar la sostenibilidad de la producción española de vacuno de carne, que actualmente representa el 18% de la producción final ganadera con un valor de 3.283,3 millones de euros.
«Los ganaderos de vacuno de carne están cada vez más involucrados en este aspecto y decididos a intervenir en mejorar sus producciones respecto a las emisiones de CO2, por lo que este proyectos les permitirá participar de lleno en la estrategia europea de cambio climático que supondrá cambios en a nivel mundial» ha destacado Matilde Moro, gerente de Asoprovac.
Durante la jornada, Elvira Carles, directora de la Fundación Empresa & Clima, ha explicado que de cara a 2020 en el conjunto de la Unión cumpliremos sin ninguna duda el objetivo de reducción de emisiones marcado (-20%) e incluso lo rebasaremos (-23%), todo ello gracias al trabajo realizado durante 25 años. Ahora bien, «en 10 años tenemos que hacer lo mismo y con más esfuerzo que lo ya realizado en los últimos 20 años. Podemos estar contentos pero nos espera mucho trabajo», ha matizado.
Por su parte, Carmen Sabrí, gerente de AgroBank ha destacado que la lucha contra el cambio climático es un objetivo común y forma parte de la estrategia de CaixaBank y de AgroBank, por lo que «a lo largo de 2019 presentaremos más productos enfocados a ésta, que se unirán a los que ya tenemos», ha añadido.
René Colditz, policy officer de la DG CLIMA, que ha intervenido en representación de Cristina Lobillo, jefa de Gabinete del Comisario Arias Cañete, ha presentado la estrategia de la DG Clima para afrontar los acuerdos internacionales logrados en materia de cambio climático poniendo de manifiesto los logros alcanzados como consecuencia de los Acuerdos de París y el más reciente de Katowice, del que ha destacado el hecho de haber conseguido un punto de encuentro común «plasmado en un documento de 133 páginas que reconoce que el Acuerdo de París está funcionando». Al respecto, ha mencionado que aunque a nivel económico supone un esfuerzo luchar contra el cambio climático «si no hacemos nada ahora por reducir las emisiones, en un futuro las inversiones para combatir sus efectos serán aún mayores».
Entretanto, Jean Baptiste Dollé, del Institut de L`Evage IDELE y coordinador del proyecto Life Beef Carbon, ha valorado el respaldo internacional que está obteniendo el proyecto “es un programa europeo doblemente etiquetado por la ONU y el ministerio de Ecología, distinguido con la etiqueta oficial LPAA (Plan de Acción París-Lima), y también premiado oficialmente en 2015 con la etiqueta COP21 por Ségolène Royal, ex ministra de Ecología, Desarrollo Sostenible y Energía, por su ambicioso alcance y rigor científico.
Dollé ha añadido que el asesoramiento y la formación al ganadero también es esencial para concluir con éxito este proyecto. «Nuestro objetivo es que los productores comprendan el papel que tiene el sector en el cambio climático» ha apuntado. En su intervención también ha incidido en que este plan se basa en una estrategia proactiva y es la primera vez que se aplican acciones de mitigación en la práctica real comercial de las granjas de vacuno.
El coordinador del proyecto Life Beef Carbon ha puesto en valor el trabajo y los objetivos conseguidos por los integrantes del proyecto, así como que la reducción de la huella de carbono de forma sostenible es posible. Además ha comentado que lo deseable sería hacerlo extensible a un mayor número de ganaderos en más países de la UE, y para ello, ha añadido «necesitamos apoyo financiero».
Matilde Moro, la gerente de la Asociación Española de Productores del Vacuno de Carne (Asoprovac), ha expuesto el estado del proyecto en España y las granjas involucradas en él. Para Moro, uno de los puntos más relevantes del proyecto es la importante sensibilización que está generando entre los ganaderos, así como el convencimiento de que, a diferencia de otros sectores de actividad, el de vacuno de carne tiene capacidad para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero. Y ha destacado que los análisis de las 2.000 granjas participantes permitirán establecer referencias sobre la huella de carbono en los sistemas de producción más representativos a nivel europeo, y así promover posteriormente mejores técnicas ambientales. Al tiempo, posibilitarán mejorar el rendimiento económico y las condiciones de trabajo del productor en cada tipo de sistema.
Moro, ha informado de que en España hay explotaciones participantes en Extremadura (15), Castilla-La Mancha (20-30), Castilla y León (50-60), País Vasco (10) y también se han incorporado recientemente granjas de Cataluña y Andalucía. Estas explotaciones se dividen en demostrativas y granjas innovadoras sobre las que se realiza un análisis «más exhaustivo» del proceso, que consiste en medir las emisiones de gases -fundamentalmente dióxido de carbono (CO2)- e implementar luego medidas concretas de mitigación de esas emisiones en cada granja.
Las primeras acciones en estas fincas ya se están desarrollando y durante la jornada se ha conocido que de los estudios realizados se desprende que la fermentación entérica del animal (proceso digestivo) suele representar más del 50 % de las emisiones de una granja de vacuno de carne. Con estos datos, los ganaderos están implantando diferentes técnicas, como rotación de pastos, plantación de encinas, sustitución de la paja por serrín en la cama del animal, impermeabilización del estercolero o una alimentación multifase cuyo fin último es reducir la huella de carbono. Moro ha indicado que la idea es determinar las prácticas más idóneas para luego promoverlas a nivel global en todo el sector y alcanzar los objetivos del programa.
Por su parte, Joaquín Chaparro Rodriguez, asesor vocal de la Secretaría General de Agricultura y Alimentación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, MAPA, ha analizado el cariz medioambiental de la nueva propuesta de la CE para la PAC, destacando que «la próxima PAC es la más importante de la historia en cuanto a conciencia climática y ambiental». Al hilo, ha señalado que ésta será mucho más exigente a nivel medioambiental, incluyendo como principal novedad los Eco-esquemas en las ayudas del primer pilar, mientras que las ayudas adicionales serán incentivadas.
La encargada de la clausura ha sido Josefa Lueso Sordo, subdirectora general de Productos Ganaderos del MAPA, acompañada por el presidente de Asoprovac, Alberto Juanola, y Jean Baptiste Dollé, coordinador del proyecto Life Beef Carbon. Los tres han subrayado la importancia de que los actores implicados en la lucha trabajen de forma unida y coordinada.
Juanola ha concluido acentuando la importancia de esta iniciativa para la concienciación del sector ganadero. “La necesidad de trabajar de manera coordinada entre administración, investigadores y sectores es fundamental para ser capaces de afrontar este reto desde el punto de vista no solo medioambiental, si no social y económico”.