Publicada la Orden de rebaja de módulos del IRPF para actividades agrícolas y ganaderas del ejercicio 2016
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica en su edición de este 4 de mayo la Orden HFP/377/2017, de 28 de abril (ver texto), por la que se reducen para el periodo impositivo 2016 los índices de rendimiento neto (módulos) aplicables en el método de estimación objetiva del Impuesto sobre Renta de las Personas Físicas (IRPF), para las actividades agrícolas y ganaderas afectadas por diversas circunstancias excepcionales en determinadas zonas geográficas.
Según el informe del Ministerio de Agricultura, durante el pasado año se produjeron circunstancias excepcionales enel desarrollo de las actividades agricolas y ganaderas que aconsejan esta rebaja fiscal a determinadas actividades. El conjunto de todas las reducciones de módulos puede implicar, según el Mapama, una rebaja de la base imponible respecto a un año normal de unos 325 millones de euros.
Hay que recordar que se trata de circunstancias excepcionales (incendios, inundaciones, sequía,heladas y otras) que se produjeron en 2016, con lo que las actuales adversidades climáticas que ha sufrido el campo español, sobre todo sequía y heladas, no tendrán traslación de rebaja fiscal hasta el año que viene (ejercicio de 2017).
La Orden ministerial incluye rebajas demódulos en todas las CC.AA. para la apicultura (de 0,26 a 0,18), bovino de leche (de 0,20 a 0,16), bovino de carne extensivo (de 0,13 a 0,09), bovino de cria extensivo (de 0,26 a 0,18), cunicultura (de 0,13 a 0,07), ovino y caprino de carne extensivo (de 0,13 a 0,09), ovino y caprino de leche extensivo (de 0,26 a 0,18), porcino de carne extensivo (de 0,13 a 0,09), porcino de cría extensivo (de 0,26 a 0,18),cereales (de 0,26 a 0,18) y productos hortícolas (tomate), de 0,26 a 0,18.
La mayor parte de las minoraciones, según el Mapama, se establecen pra dar respuesta a la sequía que afectó a grandes áreas de la Peníncula, particularmente del Sureste peninsular y a amplias zonas del interior, reduciendose el módulo de las producicones ganaderas extensivas para compensar la menor disponibilidad de pastos.
También en el ámbito de la ganadería, se reducen a nivel nacional los módulos de bovino de leche y la cunicultura para tener en cuenta su particular situación de mercado.
En referencia a los cultivos, se ha reducido el módulo de cereales a nivel nacional para tener en cuenta la situación del precio de los cereales, reduciendo su índice de rendimiento neto (IRN) a nivel nacional e igualmente se reduce el índice en módulo del cultivo del tomate.
Además, incluye recortes fiscales adicionaes a cultivos y ganadería en términos municipales de provincias de gran parte de las comunidades autónomas.
El recorte de módulos recoge también, añade el Mapama, los efectos del temporal de noviembre y diciembre sobre amplias zonas del Sureste de la Península y Baleares, afectando de manera especial a cítricos y a hortalizas, así como los efectos de la sequía en el Sur y Este de España, con amplias rebajas en oleaginosas, leguminosas y olivar.
Los efectos de otras adversidades climáticas sobre los cultivos en 2016, como las heladas de enero, los excesos de lluvia primaverales y los diferentes pedriscos producidos se ven también reflejados en la propuesta de reducción de módulos para aquellos municipios en que la adversidad en cuestión ha tenido incidencia.
Otras reducciones
Así, según CC.AA. y términos municipales afectados, es de destacar las rebajas de móculos en cereal (de 0,26 a entre 0,05 y 0,18); oleaginosas (de 0,32 a entre 0,11 y 0,22); leguminosas (de 0,26 a entre 0,05 y 0,18); productos del olivo (de 0,26 a entre 0,05 y 0,18); aceituna de mesa (de 0,26 a 0,18); cítricos (de 0,26 a entre 0,05 a 0,18); frutos secos (de 0,26 a entre 0,13 y 0,18; uva para vino con D.O. (de 0,32 a entre 0,16 a 0,22); uva para vino sin D.O. (de 0,26 a entre 0,13 y 0,18); frutos no cítricos (de 0,37 a entre 0,07 y 0,26); patata (de 0,26 a entre 0,13 y 0,18); frutos tropicales y platano (de 0,37 a entre 0,19 y 0,26); flores y plantas ornamentales (de 0,32 a 0,22); forrajes (de 0,37 a entre 0,07 y 0,26); productos hortícolas (de 0,26 a entre 0,13 y 0,18), y remolacha azucarera (de 0,26 a 0,09).
Por otra parte, la Orden HFP/1823/2016 del Ministerio de Hacieda establece en su Disposición adicional quinta una reducción a la ganadería integrada para las declaraciones de 2016 y siguientes de los IRN aplicables a los servicios de cría, guarda y engorde de ganado, pasando dichos índices de 0,42, en el caso de los servicios de cría, guarda y engorde de aves) y 0,56, para el resto del ganado, a 0,37 en ambos casos.
Asimismo,recuerda el Mapama, la Orden HAP/2222/20’14, introdujo con carácter permanente un coeficiente corrector que pueden seguir aplicando los agricultores que utilicen electricidad para el riego sobre el rendimiento neto de los cultivos regados, y que supone una reducción del 20% del mismo.
Según este departamento, el Ministerrio adoptó esta medida, junto con la exención parcial del 85% del Impuesto sobre Electricidad para los regantes, con el objetivo de compensar el efecto sobre este colectivo de la subida delas tarifas eléctricas del verano de 2013. Estas medidas permiten dar cumplimiento al compromiso del Gobierno al equiparar al colectivo regante con el resto de los sectores económicos, en lo que se refiere a la subida de los costes eléctricos.
Por último, el Mapama señala que la Orden HAP/2430/2015, por la que se desarrolla para 2016 el método de estimación objetiva del IRPF y el régimen especial simplificado del IVA, establece en su Disposición adicional primera una reducción de un 5% del rendimiento neto calculado por el método de estimación objetiva para 2016. Una medida extraordinaria de carácter horizonatal que afecta a la totalidad de los agricultores y ganaderos que tributen en estimación objetiva y cuyo efecto global, apunta ASAJA, es mayor que cualquier reducción de módulos específicos.
Desde la organización ASAJA, se recuerda también que se mantienen algunas medidas preexistentes, en sectores como uva de mesa (de 0,32, en lugar de 0,42); flores y plantas ornamentales (de 0,32 en lugar de 0,37) y tabaco (de 0,26 en lugar de 0,37).
Duras críticas desde Valencia
La organizaciones agrarias de la Comunidad Valenciana, Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y La Unión de Llauradors i Ramaders han criticado muy duramente la Orden de recorte de módulos del Ministerio de Hacienda, porque no contempla la realidad sufrida durante el pasado año por el campo de esta región.
Tal es así que desde AVA-ASAJA se exige la inmediata dimisión del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, “por la descomunal chapuza que ha perpetrado en la rebaja fiscal aplicada al campo valenciano, una mejora tributaria que de manera incomprensible deja fuera a importantes términos municipales e incluso a comarcas prácticamente enteras cuyos cultivos se vieron gravemente afectados durante 2016 por adversidades climáticas tan devastadoras como la sequía, la gota fría o diversos episodios de heladas, pedrisco y viento”.
“La discriminación de la Comunitat Valenciana, y en este caso concreto de su agricultura, por parte del Gobierno de Rajoy constituye un insulto intolerable, máxime cuando la publicación de la Orden, que recoge la disminución de módulos agrarios se produce un día después de que el Ejecutivo anunciase un acuerdo con el País Vasco en virtud del cual esa comunidad autónoma va a verse favorecida por miles de millones de euros”, lamentó el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado.
Sin embargo, esta organización agraria manifiesta también que la Generalitat ha contribuido de forma decisiva a ejecutar este desatino para el campo valenciano a través del pésimo y muy cuestionable trabajo que llevó a cabo la conselleria de Agricultura a la hora de elaborar el informe anual sobre las repercusiones negativas del clima en el sector agropecuario, un informe fundamental que luego se remite a Madrid para el que Ministerio de Hacienda elabore la lista de cultivos y municipios que posteriormente se beneficiarán de la rebaja fiscal.
“Queremos que se haga público ese informe de la Conselleria para saber exactamente qué ha pasado –reclama Cristóbal Aguado– y, desde luego, que se depuren también cuantas responsabilidades sean necesarias por la inestimable colaboración del departamento agrario de la Generalitat a esta situación que va a suponer un perjuicio económico muy considerable para miles de agricultores valencianos”.
Con todo y con eso, el presidente de AVA-ASAJA afirma al mismo tiempo que “esta mejora tributaria era absolutamente necesaria y tendrá efectos positivos para aquellos agricultores y ganaderos incluidos en la misma, pero muchos otros se han quedado fuera y consideramos que es una verdadera lástima porque era una oportunidad para dejar de marginar a la agricultura valenciana”.
Por citar sólo algunos de los términos municipales de gran peso agrícola que se han visto marginados de la rebaja de módulos aplicada a determinados cultivos cabe destacar, entre muchos otros, Alberic, Algemesí, Alginet, Alzira, Benifaió, Campo Robles, Carlet, El Puig, Gandia, L´Alcudia, Picassent, Requena, Sollana, Tavernes de la Valldigna, Utiel, Xàtiva, Xeraco o Xeresa.
En este sentido, es preciso señalar que en esta misma orden del Ministerio de Hacienda se aplica la mejora tributaria decidida para un cultivo a una determinada autonomía o una comarca en su conjunto, mientras que para la Comunitat Valenciana no se ha seguido ese mismo criterio, sino que se ha optado por establecer un listado de municipios que ha resultado errónea, caótica y discriminatoria.
Así las cosas, AVA-ASAJA exige una rectificación inmediata y que se publique una Orden con carácter de urgencia en la que se incluyan todos los términos municipales y localidades valencianos que se han visto excluidos.
“Los agricultores valencianos –sostiene Cristóbal Aguado– tenemos motivos sobrados para sentirnos irritados y profundamente decepcionados porque esta rebaja no refleja en absoluto la dura realidad de un sector que el año pasado perdió, sólo a causa de incidentes climáticos, más de 600 millones. Visto lo visto, da la impresión de que los políticos usan los fondos públicos en beneficio de su propia conveniencia e interés en lugar de hacerlo en función de las necesidades reales de la sociedad”.
Agravios comparativos
LA UNIÓ de Llauradors indica que las reducciones fiscales para los agricultores y ganaderos de la Comunitat Valenciana publicadas en el BOE y que sirven para la declaración de la renta de este año, son totalmente incongruentes y crean agravios comparativos entre agricultores según su lugar de empadronamiento y cultivo.
En el caso de no ser rectificadas y subsanadas LA UNIÓ solicitará que se le declare persona non grata en la Comunitat Valenciana al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
Así, el Ministerio de Hacienda no ha tenido en cuenta las aportaciones del sector agrario valenciano y le discrimina tal y como está haciendo con la financiación autonómica o el Corredor Mediterráneo, entre otras cuestiones. Se trata de un sector abocado fundamentalmente a la exportación y que aporta mucho al PIB estatal gracias a los envíos al exterior y, sin embargo, el Gobierno central no sólo no le compensa a pesar de estar sumido en una grave crisis de rentabilidad, sino que lo humilla con unas reducciones “insultantes mediante un listado por orden alfabético de localidades como si fuera los premios de la lotería”.
La rebaja fiscal del Gobierno, aparte de tener olvidos muy importantes y graves, establece diferencias en los módulos entre agricultores de pueblos vecinos que tienen la misma orientación productiva y han sufrido pérdidas de ingresos por las mismas causas.
Pero estas reducciones generalizadas se vuelven a bajar en función del cultivo y localidad y es aquí donde el Ministerio establece una disparidad en la tributación y por tanto un agravio que provoca pérdida de competitividad entre agricultores de pueblos cercanos que cultivan el mismo producto.
El cultivo del caqui se reduce en pueblos muy concretos de las Riberas como Alcàntera, Antella, Càrcer Cotes, Sellent, Llombai, Montroi, Real, Toris, Favara i Llaurí; pero se quedan fuera las localidades más importantes de cultivo de la Ribera como l’Alcúdia, Carlet, Alberic, Alginet, Alzira, Benifaió, Guadassuar o casi todas las de la Vall d’Albaida y la Costera.
El cultivo de la alcachofa, que tiene una Denominación de Origen en Benicarló, no tiene allí ningún tipo de reducción y sí por el contrario en la cercana Torreblanca, circunstancia extraña puesto que la producción principal y referente se sitúa en la población benicarlanda.
En el cultivo de los cítricos hay gran disparidad entre unas zonas y otras que van desde los 0,05 a los 0,18. Nules y Borriana, poblaciones vecinas tienen 0,13 y 0,18, respectivamente; como Vinaròs tiene 0,09 y Càlig 0,18.
Se quedan fuera la mayor parte de localidades de la Safor, poblaciones de la Ribera Baixa como Cullera, Albalat de la Ribera, Benicull i Fortaleny, en la de l’Horta Sud Picassent o Silla, en l’Horta Nord El Puig, Puçol o Meliana, Bétera en el Camp de Túria, todas las de la Marina Alta y Baixa donde hay cultivo y algunas del Palancia como Castellnovo, Soneja o Sot de Ferrer. Lo más fácil y efectivo en el cultivo principal del campo valenciano era haber reducido el módulo fiscal en todas las localidades productoras de la Comunitat Valenciana.
El cultivo del arroz sigue, un año más, fuera de las reducciones fiscales del Gobierno cuando tiene problemas fitosanitarios y de mercado.
El cultivo del níspero se reduce en algunas localidades de la Marina Baixa, pero se quedan sin reducciones fiscales los productores de Callosa d’En Sarrià, localidad principal de esta fruta y de la Denominación de Origen.
En la uva de mesa del Vinalopó, con DO, hay una gran disparidad en la reducción entre unas poblaciones y otras. Se queda fuera así mismo una localidad productora importante como l’Algueña. Tampoco tiene ningún tipo de reducción en ningún cultivo una población tan agraria en la comarca como Pinós. En la uva de vino se le rebaja a localidades alicantinas de la Marina, pero no a Pinós, Villena o l’Agueña entre otras. El aguacate de la zona de Callosa d’En Sarrià tampoco tiene reducción. El cereal no tiene reducción en prácticamente ninguna localidad de la provincia de Castellón.
Las reducciones para el cultivo del almendro son muy selectivas y aisladas y en el cultivo de la avellana en Castellón se han publicado reducciones en localidades donde no hay plantaciones.
La comarca de Utiel-Requena es de nuevo una de las principales perjudicadas por las reducciones fiscales a pesar de sufrir numerosos daños climatológicos. Sólo hay rebajas para el almendro en Camporrobles, Caudete de las Fuentes, Requena, Sinarcas, Utiel y Villargordo del Cabriel y únicamente en Fuenterrobles o Venta del Moro para la uva de vino con y sin DO.
En la comarca castellonense del Alto Palancia no hay reducciones ni para la fruta ni para los frutos secos.
El sector ganadero valenciano esperaba no obstante una rebaja adicional a la ya conocida del 0,37 por la situación de crisis de mercado en los sectores avícola y porcino, por la incidencia del veto ruso en porcino y porque no tienen ayudas como otros sectores agrícolas.
Por lo que se refiere a las reducciones establecidas con carácter provincial para todos los municipios de Alicante y Valencia para la declaración de la Renta 2016 son para cereales (0,13 en Alicante y 0,09 en Valencia, algo ilógico puesto que debería ser la misma rebaja fiscal) y olivar (0,13 en ambos casos), mientras que para la de Castellón sólo es para olivar (0,13), injusto también puesto que los productores de cereal castellonenses han tenido los mismos problemas que los de las otras dos provincias.
LA UNIÓ exige que de forma inmediata el Ministerio de Hacienda que rectifique esta Orden para que recoja la realidad fiscal agraria valenciana del 2016 y solicita a todos los Ayuntamientos afectados y a todos los partidos políticos con representación en Les Corts que muevan ficha y contribuyan a este objetivo porque el desastre no puede ser más evidente.