Rosa Matas. Periodista
Julio Roda Peñalvo es el director general de Agrosevilla, el grupo líder en la venta de aceitunas de mesa en el mundo. Las aceitunas de la cooperativa de segundo grado llegan a 75 países. Con sede en La Roda de Andalucía (Sevilla), agrupa a doce cooperativas andaluzas y a unos 4.500 agricultores. Ha cerrado el ejercicio 2022 con un crecimiento en volumen del 7%. Su facturación se ha incrementado un 22% en una campaña en la que los costes también se han disparado. Con más de cuarenta años dedicándose prácticamente solo a la exportación, su último plan estratégico contempla un pequeño giro para tener presencia en España. A corto plazo, quiere que un 5% de su negocio se quede en el mercado nacional.
Julio Roda Peñalvo es el director general de Agrosevilla, el grupo líder en la venta de aceitunas de mesa en el mundo. Las aceitunas de la cooperativa de segundo grado llegan a 75 países. Con sede en La Roda de Andalucía (Sevilla), agrupa a doce cooperativas andaluzas y a unos 4.500 agricultores. Ha cerrado el ejercicio 2022 con un crecimiento en volumen del 7%. Su facturación se ha incrementado un 22% en una campaña en la que los costes también se han disparado. Con más de cuarenta años dedicándose prácticamente solo a la exportación, su último plan estratégico contempla un pequeño giro para tener presencia en España. A corto plazo, quiere que un 5% de su negocio se quede en el mercado nacional.
¿Cómo ha sido la última cosecha de las cooperativas de Agrosevilla?
El mercado tendrá este año una reducción de alrededor del 30%, nuestras cooperativas están en torno a ese porcentaje.
¿Qué representa la aceituna y cuánto el aceite en su cifra negocio?
El negocio de la aceituna representa el 90% de nuestro volumen. El del aceite es complementario, lo que nos hace es fortalecer nuestra propuesta a los clientes.
¿Cómo comenzó la expansión de la cooperativa ?
Nosotros empezamos en Italia, Arabia y Estados Unidos y tenemos presencia en 75 países. Nuestra exportación está dividida en lo que nosotros llamamos ocho áreas. Las tres zonas geográficas principales para nosotros son Norteamérica, Arabia Saudita e Italia.
¿Y en Asia?
Estamos trabajando de una manera intensa, ganando distribución y volumen. Asia todavía no es de las áreas principales pero es nuestro cuarto mercado de referencia.
¿Qué balance tienen con los países del Este?
Los países del Este el año pasado obviamente tuvieron una influencia negativa en nuestra certera por el efecto de la invasión rusa a Ucrania, en el sector es un 15% del volumen. Nuestra presencia es menor.
¿Qué retos tiene la PAC con el olivar y en concreto con la aceituna de mesa?
Con la nueva PAC la ayuda al olivar va a ser menor y como consecuencia, al recibir menos el agricultor, tendrá menos rentabilidad. El olivar está en un período de reconversión en los procesos hacia un cultivo más intensivo en el que tiene que haber una concentración y una bajada de los costes de producción.
Al revés de lo que han hecho la mayoría de las empresas, después de toda la vida exportando ahora Agosevilla quiere abrir mercado nacional.
Somos una cooperativa de segundo grado que nació con un deseo principal: la comercialización de la aceituna Hojiblanca, muy buena para la producción de aceite, porque en España la variedad de mesa predominante es la Manzanilla.
Agrosevilla lo que hizo fue buscar zonas de comercialización para esta aceituna. Por eso nace con vocación eminentemente exportadora. El planteamiento ahora es que además de tener presencia internacional y ser líderes en exportación, tenemos que tener presencia en el mercado nacional. Ese es el camino que hemos emprendido.
Empezaron a comercializar en el mercado nacional en 2020, un año de pandemia. Difícil comienzo.
Se nos paró el proyecto dos años. Lo hemos reiniciado en 2022 con un nivel de éxito interesante en el canal FoodService, la hostelería organizada, donde nosotros tenemos acuerdos con cadenas nacionales muy importantes, y con un éxito relativo en el canal Retail en el que los tiempos son más lentos y esperamos que empiece a fructificar a lo largo de este año.
¿Qué producción quieren vender en España en cuatro o cinco años?
Nuestro objetivo es alcanzar un 5% de nuestra facturación en el negocio nacional a corto plazo. Es un objetivo modesto, pero yo creo que con la ambición suficiente para que la organización esté tensionada para alcanzarlo, pero también conociendo la realidad del negocio español donde esta categoría es muy estable, ya tiene mucho recorrido.
¿Está este negocio muy maduro?
Sí, hay que tener en cuenta que la distribución organizada española está dominada por clientes a los que se les tiene que demostrar cierto nivel de recorrido para poder trabajar con ellos.
Sus aceitunas negras rellenas de salmón, de Queso Manchego y de pimiento asado picante han sido seleccionadas en París en la feria SIAL.
Uno de los reconocimientos ha sido por la capacidad de innovación en la aceituna negra. Requiere un proceso productivo más complejo que solamente el de elaborar la aceituna negra californiana, con proceso de esterilización incluido.
¿Están trabajando en algún otro producto?
Es uno de los pilares estratégicos que tenemos: la innovación dentro de la aceituna de mesa que como decía anteriormente es un sector muy maduro. Innovar es uno de los pilares para poder desarrollar el consumo de aceituna de mesa entre los jóvenes. Darles nuevos sabores, nuevas presentaciones y nuevos usos.
Y ocupar más espacio en los lineales.
Efectivamente, el espacio en los supermercados e hipermercados es fundamental. La manera de poder tener una mayor cuota es a través de ganar relevancia y la innovación es una de las palancas de ésta. Tenemos productos en cartera que verán la luz este 2023. Acabamos de lanzar una aceituna Gordal aliñada sin aditivos artificiales en diciembre, que ya estamos comenzando a comercializar y nuestra cartera de productos está llena para este año.
¿Cuál ha sido la facturación y cómo ha cerrado Agrosevilla 2022?
Alrededor de 140 millones netos. Ha sido un buen año, hemos crecido en volumen aproximadamente un 7% hasta 60.000 toneladas a pesar de la caída de la producción; a través de compras hemos sido capaces de hacer ese volumen creciendo nuestra facturación en torno al 22%. Lo que ha ocurrido es que este incremento de facturación lo que ha hecho es compensar el gran incremento de costes que tuvimos el año pasado y que se repite para 2023.
¿Qué necesita el sector de aceituna de mesa en España?
Necesita un mayor nivel de concentración para poder aumentar nuestra rentabilidad. Tenemos que buscar mayores colaboraciones entre los distintos jugadores de la categoría.
¿Y en el mercado exterior?
La aceituna española necesita un proceso de aprendizaje en países en los que el conocimiento de la Dieta Mediterránea es pequeño. Si hablamos de Europa, de los países árabes, de América, el nivel de conocimiento de la aceituna española es muy alto. Sin embargo, si hablamos de zonas como Asia, este nivel es bajo y hay que comunicar mucho a su consumidor en cuáles son sus usos y sus beneficios. La divulgación y la educación en este camino es muy importante.
¿Cómo les están afectando los aranceles de Estados Unidos, que considera que la aceituna negra de mesa se vende por debajo de su precio de mercado por las subvenciones de la PAC?
Este problema surgió en 2017, cuando se presentó una denuncia por parte de agricultores y fabricantes de referencia en EE.UU. de California. Esa denuncia se elevó al Departamento de Comercio, que impone aranceles efectivos a partir de 2018. Arrancaron con una sanción muy potente del 35% entre el arancel ligado a ayudas de la PAC de la Unión Europea y de lo que los estadounidenses llaman el antidumping, la venta a pérdidas.
A la vez que se imponen los aranceles se empieza un proceso por parte de la aceituna de mesa española, a través de la asociación empresarial Asemesa y las empresas implicadas, en las que estamos varias compañías. En nuestro caso ese arancel del 35% es ahora del 7,9%, aunque probablemente nos lo vayan a subir en el próximo periodo de revisión porque como ha caído mucho el volumen de venta, las ayudas de la PAC afectan de una manera más importante a un volumen menor.
¿Qué ha ocurrido en este período?
Ha habido esa disputa judicial y reclamaciones de Asemesa ante la Unión Europea. Bruselas acudió a la Organización Mundial del Comercio (OMC) que dictaminó que las propuestas que hacía el Departamento de Comercio de EE.UU. no eran correctas. Le dio de plazo hasta el 14 de enero para asumir estas recomendaciones, pero estel Departamento determino que no va a hacer seguimiento de las recomendaciones de la OMC, con lo cual sigue cuestionando las ayudas de la PAC.
¿Cuál es el siguiente paso?
Esto va a llevar a una negociación clara. Creo que la CE y el Gobierno español tiene que seguir haciendo presión para quitar estos aranceles injustos que lo que han logrado es que el volumen del negocio global de aceituna negra en EE.UU. haya caído un 70%. Este país es el mercado de referencia de aceituna de mesa, consume aproximadamente 250.000 toneladas de las que un 70% es aceituna negra. El mayor exportador era España porque California ya no tiene capacidad productiva para cubrir el mercado americano, dado que su cosecha media de unas 50.000 toneladas. Tiene que comprar fuera, compraba a España y EE.UU. ha dirigido sus compras a otros países como Marruecos o Grecia, aunque en calidad no ha encontrado suficiente producción.