El Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) confirmó el jueves 10 de marzo la detección del virus de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) en dos nuevas explotaciones localizadas en los municipios de El Rubio y Écija, en la provincia de Sevilla.
Se elevan a 29 los focos de “gripe” aviar de alta patogenicidad en explotaciones de aves de corral en España
Con éstos son 29 los focos de IAAP H5N1 en aves de corral en España en el presente 2022. De este total, 16 focos (55%) se detectaron en explotaciones de pavos de engorde; otros 5 (17%) en granjas de gallinas reproductoras; 4 más en explotaciones de gallinas ponedoras; 2 (7%) en granjas de broilers (pollitos de cría) y uno, respectivamente, en explotaciones de gallinas camperas y de recría.
Los dos últimos focos son de una explotación de broilers en el municipio de El Rubio y de una explotación de gallinas reproductoras en el municipio de Écija, con un censo aproximado de 80.700 y 10.500 animales respectivamente. Ambas se encuentran en el radio de la zona de restricción (ZR) de anteriores focos notificados en la zona.
La sospecha de la enfermedad en ambos casos, vino derivada por la detección de un incremento anormal de mortalidad que comenzó el 8 y 5 de marzo.
Las muestras tomadas por parte de los Servicios Veterinarios Oficlales (SVO) de la Junta de Andalucía, se remitieron al Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, como Laboratorio Nacional de Referencia de la Influenza aviar en España, donde se conformaron que se trata en ambos casos de una cepa de IAAP subtipo H5N1.
Los SVO de la Junta de Andalucía han adoptado inmediatamente las siguientes medidas, establecidas en el Reglamento Delegado (UE) 2020/687 de la Comisión, como son la inmovilización inmediata de las dos explotaciones afectadas; la realización de la encuesta epidemiológica, con objeto de conocer el posible origen de los focos, y explotaciones en riesgo por movimientos de personas y vehículos.
Se ha procedido también a realizar el sacrificio de todo el censo de las explotaciones afectadas y a la destrucción oficial de los cadáveres, pienso y demás materias contumaces que pudieran vehicular el virus, según lo establecido en la normativa de subproductos (SANDACH), así como al establecimiento de una zona de restricción alrededor de los focos de 3 km de zona de protección y 3-10 km de zona de vigilancia.
En relación con la detección en aves silvestres, hasta la fecha se mantiene la detección de un total de 28 casos en 2022 en las provincias de Lérida, Girona, Ávila, Palencia, Valladolid, Salamanca, Sevilla, Huelva, Cádiz, Córdoba, Madrid, Cáceres y Badajoz.
En total, hasta este 10 de marzo se han detectado en nuestro país 57 focos o casos de “gripe” aviar en explotaciones de aves de corral o en distintas aves silvestres.
Las encuestas epidemiológicas realizadas en los focos indican que las causas más probables de introducción del virus en las explotaciones domésticas han sido el posible contacto con aves silvestres infectadas y la proximidad geográfica o contactos indirectos con focos anteriores (relaciones por vehículos de transporte o personal principalmente).
El MAPA recuerda que, si bien hasta el momento no hay constancia de que el subtipo H5N1, que durante los últimos meses está afectando a Europa tenga capacidad zoonótica significativa, es decir, su capacidad de transmitirse a las personas resulta muy reducida, se recomienda minimizar el contacto innecesario con las aves que muestren síntomas clínicos o se hallen muertos en el campo.
En cualquier caso, este virus no puede ser transmitido al hombre a través de carne de ave cocinada, huevos o productos procesados derivados de ellos.
Desde el MAPA se recuerda también la necesidad de reforzar las medidas de bioseguridad en las explotaciones avícolas, especialmente aquellas medidas destinadas a evitar el contacto con aves silvestres, así como reforzar la vigilancia pasiva tanto en explotaciones avícolas como en aves silvestres, notificando a los servicios veterinarios oficiales cualquier sospecha de enfermedad.