La cama compostada es un sistema de alojamiento del vacuno lechero que busca mejorar el bienestar de los animales, a la que vez que optimiza el manejo de las deyecciones. La biomasa forestal, un subproducto resultante de la limpieza del sotobosque, podría ser una alternativa al serrín como material de la cama compostada.
En un estudio se concluyó que, el crecimiento de algunas especies microbianas que pueden afectar a la salud del ganado fue mejor controlado en la cama compostada con la biomasa forestal, aunque el rendimiento del compostaje y el bienestar de las vacas podría empeorar.
Es importante destacar que las características iniciales del material de la cama compostada, como la humedad y el tamaño de partícula, son determinantes para un óptimo rendimiento del compostaje, que a su vez condiciona otros parámetros como la población microbiana de la cama y el bienestar de las vacas.
Independientemente del tipo de material de cama, la cama compostada contiene un alto contenido en materia orgánica y un bajo contenido en nutrientes en comparación con el estiércol, por lo que podría ser un buen fertilizante orgánico para los campos de cultivo.
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