Los bioestimulantes son una herramienta que actúa en el suelo como un participante biológico activo para la producción del cultivo. Con suelos enfermos o degradados no debemos esperar cultivos sanos, si bien con el uso de estos productos ha cambiado nuestro sistema de producción siendo más sostenible, equilibrado, e incluso más rentable, siempre y cuando se sepa cómo y dónde aplicarlos.
Bioestimulantes y agricultura sostenible
Miguel Ángel Domene Ruiz. Responsable de Área Alimentación y Salud. Estación Experimental Cajamar.
El consumidor actual vuelve a exigir un nuevo reto a la industria alimentaria, ya que la calidad de los productos agroalimentarios se convierte en el principal factor de preferencia para su elección.Todos los actores del sector agroalimentario se han dado cuenta de que nuestra salud empieza en el propio suelo; en este sentido el uso de bioestimulantes es el ejemplo perfecto de manejo sostenible, debido a que se optimiza el aprovechamiento de los recursos naturales, siendo consciente de que el suelo es un ente vivo al que hay que cuidar y en el que hay que promover el aumento de la biodiversidad.
Los bioestimulantes se definen como productos naturales o sintéticos que en su formulado contienen sustancias tanto de origen inorgánico como orgánico y/o microorganismos cuya función, al ser aplicados sobre la parte aérea de plantas o rizosfera, es la de estimular procesos fisiológicos naturales, cuyos efectos principales son: mejora del cultivo, vigor, rendimiento y calidad.