Un cultivo captador de nitrógeno (CCN) es un cultivo que se intercala entre los cultivos principales de la rotación y, por tanto, crece en las épocas en que no hay un cultivo principal implantado en la parcela. Su objetivo es extraer el nitrato del suelo y evitar su lavado. El nitrógeno absorbido se incorpora a los tejidos de la planta y queda temporalmente protegido, evitando así el lavado del mismo en caso de lluvias suficientemente abundantes que puedan producir drenaje de agua por debajo de la zona de enraizamiento del cultivo.
Cultivos captadores de nitrógeno, una buena práctica en el cultivo de maíz
Francesc Domingo Olivé y Albert Roselló Martínez. Institut per la Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA) Mas Badia. La Tallada d’Empordà.
El cultivo captador de nitrógeno (CCN) se destruye e incorpora al suelo antes de llegar al estadio de floración o justo en este momento, y antes de empezar a preparar el terreno para el siguiente cultivo, de forma que el N que extrae el CCN no desaparece. Al descomponerse la biomasa incorporada al suelo, el N absorbido se pondrá a disposición de los siguientes cultivos. Por lo tanto se tendrá que considerar en el momento de planificar el abonado.
No se obtiene un beneficio económico directo de estos cultivos captadores de N. Aunque en algunos casos, en condiciones de exceso de nutrientes en la parcela, se puede realizar un aprovechamiento forrajero con el fin de extraer el N excedentario del sistema, si el cultivo lo permite. De todas formas, en ningún caso tiene sentido la fertilización de los CCN, ya que precisamente su objetivo es el de absorber el nitrógeno mineral que contiene el suelo (el disponible al final del cultivo anterior o el mineralizado posteriormente), para evitar su lavado en épocas con elevado riesgo de lavado de nitrato.