Vida Rural analiza los nuevos modelos productivos de cultivos como el pistachero, nogal y avellano, así como el almendro basado en este caso en su intensificación, con lo que se ha pretendido incrementar la precocidad productiva de la plantación (con el desarrollo de nuevas variedades autofértiles y de floración tardía), reducir los costes de la mano de obra (mecanizando todas las operaciones del cultivo), incrementar el potencial productivo de las nuevas variedades y mejorar la gestión de la recolección a partir de sistemas que trabajen en continuo, así como la fertilización del cultivo, las principales enfermedades y plagas (como la mancha ocre, botritis, monilia, pulgón, araña amarilla o mosquito verde) y el control de malas hierbas, necesidades de riego y otras peculiaridades del cultivo.