Para ayudar a los agricultores en la toma de decisiones a la hora de plantear sus rotaciones, se planteó en 2010 el ensayo que nos ocupa, que trata de poner en evidencia las diferencias productivas y de calidad del trigo harinero, sembrado después de diferentes cultivos precedentes, como son: veza, cebada, colza y barbecho blanco, utilizando en todos los casos tres niveles de fertilización nitrogenada para comprobar los rendimientos en grano de las parcelas con distinto cultivo precedente, así como el contenido en proteínas del grano y las cantidades de nitrógeno extraído por el trigo en cada caso.
Influencia del cultivo precedente sobre la fertilización nitrogenada y el rendimiento del trigo
Prudencio López Fuster y Francisco Valentín Madrona. Instituto Técnico Agronómico Provincial de Albacete. ITAP.
La intensificación de la agricultura a partir de la segunda mitad del Siglo pasado fue apoyada por todos los Estados europeos según sus posibilidades, en la medida en la que estaba en juego la seguridad alimentaria de un continente que se recuperaba de las dos grandes guerras Europeas que habían desmantelado todo el tejido productivo agrario de la zona.
Esta intensificación se produjo desde los tres aspectos fundamentales en el aumento de los rendimientos agrícolas: los avances en la mejora genética de las especies, la utilización masiva de fertilizantes químicos y la transformación en regadío de extensas superficies sobre todo en los países del sur de Europa. Para dar idea de las cifras y centrándonos en la fertilización, decir que en el periodo 1960-1980 el uso de fertilizantes nitrogenados pasó de 3,3 a 10,4 mjillones de toneladas.