Actualmente, las segadoras de discos son las máquinas más utilizadas en nuestras explotaciones forrajeras para realizar la labor de siega. A pesar de tratarse de máquinas mecánicamente sencillas, disponen de numerosos componentes móviles por lo que su mantenimiento debe ser adecuado para garantizar que la calidad del proceso de siega sea óptima.
Mantenimiento de las segadoras de discos utilizadas en cultivos forrajeros
F. Javier García Ramos. Escuela Politécnica Superior de Huesca. Universidad de Zaragoza.
Las segadoras de forraje han ido evolucionando técnicamente durante las últimas décadas. Aunque existen diferentes tipologías, son las segadoras rotativas de discos las máquinas que actualmente han ganado la mayor cuota de mercado debido básicamente a su alta capacidad de trabajo en comparación con las clásicas barras de corte al poder conjugar velocidades y anchuras de trabajo elevadas. Otros aspectos que han propiciado su mayor presencia en el sector son su mejor comportamiento frente a cultivos tumbados y su facilidad de mantenimiento y regulación sobre todo en lo referente a la facilidad de cambio de las cuchillas de corte.
No todos son aspectos favorables cuando analizamos una segadora de discos. Como desventaja su precio se sitúa en torno a un 20-30% por encima del de las barras de corte y demandan mayor potencia del tractor, en torno a un 50% más. También requieren el uso de tractores con cabina cerrada para evitar el alcance de objetos lanzados por la segadora.
Cuando se utilicen segadoras propensas al lanzamiento de objetos se suele proteger con rejillas la parte del tractor que trabaja del lado de la segadora, para evitar así posibles daños. Por otro lado, para muchos agricultores el corte o aspecto del cultivo tras segar con una segadora de discos es menos vistoso que el obtenido con una segadora de barra, aunque, en este sentido, los estudios llevados a cabo reflejan que no hay diferencias significativas en el re-establecimiento posterior del cultivo entre ambos tipos de segadoras.