Como continuación del artículo publicado en el último especial de olivar de Vida Rural, en el que se expuso la situación a la que se había tenido que enfrentar el olivar de la localidad de Llanos de Don Juan (Córdoba) por un ataque inusual de Euphyllura olivina, en este segundo artículo se detallan las actuaciones llevadas a cado por los servicios de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía para evaluar la situación, actualizar el método de muestreo y realizar un tratamiento colectivo y simultáneo para disminuir las poblaciones existentes en las 3.000 hectáreas afectadas.
Estrategias de control para daños inusuales del algodoncillo en olivar
Manuel Ruiz Torres1, Rocío Montes2, Juan Manuel González3 y Manuel Cuenca4. 1Laboratorio de Producción y Sanidad Vegetal de Jaén. 2Técnico de Dcoop. 3Oficina Local Agraria de Priego de Córdoba. 4Director técnico de Sosteagro.
Llanos de Don Juan es una pequeña pedanía del municipio de Rute, ubicado en Córdoba y a 6 km de Lucena, la localidad más cercana. Su población es únicamente de 398 habitantes y está dedicada casi exclusivamente al cultivo del olivo, de forma similar a los municipios vecinos de Lucena e Iznájar.
Se trata de una zona caracterizada por su clima benigno con temperaturas ligeramente más suaves en invierno que en otras zonas de la provincia y precipitaciones medias también superiores a las de otras comarcas. Todo esto conlleva que tenga grandes producciones de aceituna en el olivar de secano, superiores a la media del resto de Andalucía.
Llanos de Don Juan cuenta con una Sociedad Cooperativa Agraria, la Cooperativa San José, que controla unas 3.000 ha de olivar. En la campaña 2015/16 se produjo un fuerte ataque de Euphyllura olivina en un foco inicial y, posteriormente, en la campaña 2016/17, ese ataque se extendió a dos terceras partes de la superficie de olivar bajo dominio de la cooperativa. Las pérdidas económicas en esa campaña se valoraron en más de 4 millones de euros, de hecho, se esperaban 19 millones de kg de aceituna y al final se recolectaron sólo 12 millones de kg. En el foco principal de actividad del insecto, de unas 600 hectáreas, se perdió el 80% de la cosecha.
El problema tenía un doble enfoque:
– Por un lado, el punto de vista local. Hubo que desarrollar una estrategia para poder encontrar una solución al problema.
– Por otro lado, el punto de vista general. El algodoncillo es un insecto que se encuentra en todos los olivares andaluces, si bien rara vez ocasiona daños. Existía el riesgo de que pudiesen repetirse los daños en cualquier punto de la geografía olivarera andaluza, si se daban las mismas condiciones que habían dado lugar a la explosión demográfica de Llanos de Don Juan.
Por todo ello hubo una intervención de los servicios de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía. Se evaluó la situación, se mantuvieron contactos frecuentes con el equipo técnico y productores, y en la campaña siguiente, en marzo de 2017, se realizó un tratamiento conjunto y simultáneo (en un plazo de diez días) para toda la zona afectada por el ataque, que logró disminuir las poblaciones de E. olivina. Además, se redujo el uso de fertilizantes nitrogenados por si pudieran promover la explosión poblacional y se promovieron las buenas prácticas que favorecen a la fauna auxiliar. Estas medidas permitieron molturar en la cooperativa 19.400.000 kg de aceituna en la siguiente cosecha.