En este artículo se destacan tres recomendaciones de Aimcra relacionadas con la primera fase del cultivo de remolacha de siembra de otoño, que son determinantes de un buen rendimiento: hacer una siembra temprana, emplear una variedad recomendada y realizar un control eficaz de las malas hierbas.
Recomendaciones para la siembra otoñal de remolacha
Rodrigo Morillo-Velarde y José Luis Bermejo. Aimcra.
La campaña 2014/2015, con siembra en otoño 2014, se ha caracterizado por una precipitación inferior a la media de los últimos veinticinco años (una reducción del 35%). Las lluvias otoñales fueron moderadas, con precipitaciones continuas en la segunda quincena de noviembre, lo que retrasó algunas siembras. La primavera se ha caracterizado por la escasez de lluvias.
Respecto a las temperaturas, destacan especialmente los altos valores alcanzados por las máximas en la primera mitad del verano. En esta campaña sur de remolacha, se han recibido en fábrica 678.000 toneladas de raíces con una polarización media de 16,7 grados y un descuento medio de 10,1%. Esto supone un rendimiento medio de 85,1 t/ha, ligeramente inferior al de la pasada campaña. El posible motivo de este menor rendimiento han sido las elevadas temperaturas mencionadas, lo que ha afectado severamente a la riqueza. De hecho la polarización media ha sido más de medio grado inferior a la media del año pasado.
Una novedad este año ha sido la firma de un acuerdo, por cinco años, entre las organizaciones agrarias andaluzas y Azucarera, con el objetivo de entregar la remolacha entera, sin descoronado. Esto supone un beneficio para el agricultor (más rendimiento y menos pérdidas de polarización) y para la industria azucarera (mejor calidad de remolacha y más cantidad de azúcar disponible.